Ibai AZPARREN
IRUÑEA

Reclaman más prevención y personal para la atención de la violencia sexista

Trabajadoras sociales pidieron más recursos para la red de atención a mujeres que sufren casos de violencia machista en el «Pleno social» titulado «Valorando las respuestas contra las violencias sexistas» que se celebró ayer en el Parlamento navarro, en vísperas del 25N.

«Los recursos comienzan a trabajar en el momento en el que la mujer toma la decisión de pedir ayuda», apuntó Olga Aroz, trabajadora social, en la ponencia sobre los ejes centrales para la erradicación de la violencia sexista celebrada en el hemiciclo navarro, con motivo de las IV jornadas sobre la violencia contra las mujeres. Y una vez que eso ocurre, «la primera medida es la atención integral –recurso que en la zona norte todavía no existe–, luego equipos de urgencia y finalmente los recursos como mujer víctima». Sin embargo, insistió en que es necesario «empezar a trabajar en los recursos de prevención» para poder avanzar. Y denunció que «todos los recursos están externalizados», frente a lo que considera indispensable «abordar la violencia machista desde una red de atención pública y coordinada».

En relación a las dificultades que se encuentran en el día a día, Aroz remarcó la «visión del ámbito privado», ya que «damos un valor excesivo a la confidencialidad, y esto dificulta impedir a tiempo cada caso de violencia sexista». Por lo tanto, incidió en el trabajo de prevención también en el entorno cercano de la víctima: «Si se sabía lo que estaba sucediendo, se tenía que haber trabajado, no podemos esperar a que estas víctimas acudan a los recursos».

En este «Pleno social» que mira al Día contra la Violencia Machista del domingo, Oroz quiso explicar los casos en que hay menores de por medio, y que por tanto «también son víctimas de esta violencia». En este aspecto, subrayó la necesidad de una labor de prevención «antes de poner a la mujer en la disyuntiva de tener que elegir entre tus hijos o tu relación de pareja», aludiendo a los casos en los que el menor pasa a ser responsabilidad del Gobierno de Nafarroa si la mujer no abandona dicha relación.

Junto a ella, Izaskun Esparza, trabajadora de recursos de acogida para las mujeres en situación de violencia de género, evidenció que «con una educadura de turno es imposible atender a mujeres de estas características» y explicó que «la sensación que se les queda a estas educaduras es que no se puede realizar una atención de calidad». Aunque indicó que tras varias reuniones con la Administración han logrado una psicóloga y una trabajadora social más, Esparza consideró que «estos parches no dan la solución».

En virtud de ello, solicitó al Gobierno de Nafarroa, además de un aumento de personal, «dar un seguimiento a estos recursos y velar por las condiciones de los trabajadores».