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Cinco años de terror del «califato»

El «califato» proclamado por el Estado Islámico (ISIS) el 29 de junio de 2014 se desmoronó a la velocidad vertiginosa con la que se expandió y ayer, 23 de marzo, desapareció territorialmente con cerca de cinco años de vida.

Miembros de las FDS, en una ceremonia en recuerdo a sus compañeros caídos en combate contra el ISIS. (Giuseppe CACACE / AFP)
Miembros de las FDS, en una ceremonia en recuerdo a sus compañeros caídos en combate contra el ISIS. (Giuseppe CACACE / AFP)

La breve historia del «califato» yihadista dirigido por Abu Bakr al-Bagdadi, que llegó a extenderse 54.000 kilómetros cuadrados entre Siria e Irak y sembrar el terror en ese vasto territorio, cuenta con varios hitos importantes:

El surgimiento y ascensión

Abu Bakr al-Bagdadi anuncia la creación del Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIS) el 4 de abril de 2013, al fundir su grupo, nacido en Irak, con la filial siria de Al Qaeda. Comienza a ocupar ciudades en el noreste de Siria, país en guerra desde marzo de 2011, y a llevar a cabo ejecuciones públicas en las plazas que toma.

Posteriormente, el líder de Al Qaeda, Ayman al-Zawahiri, desautoriza la fusión, dando paso a hostilidades entre ambos grupos en las que triunfa la formación más radical, capitaneada por Al-Bagdadi.

El 14 de enero de 2014, el ISIS conquista Al-Raqqa, ciudad que estaba en manos de los rebeldes sirios, y la convierte en su cuartel general. En el futuro, será su capital de facto.

Seis meses después la organización comienza una expansión veloz por el norte de Irak, ante la huida en desbandada del Ejército iraquí, que deja atrás sus cuarteles, sus arsenales y vehículos blindados.

El 10 junio el grupo se apodera de Mosul, la mayor ciudad del norte de Irak, con cerca de dos millones de habitantes, y el día 29 de ese mes, Al-Bagdadi proclama en el oeste de la misma urbe la instauración de un Estado islámico y se erige en su «califa».

Apogeo e internacionalización

El ISIS detiene su vertiginoso avance el 13 de junio de 2013, a cerca de 90 kilómetros de Bagdad, en la primera vez que el Ejército iraquí le planta oposición. Después sigue su expansión hacia otras zonas en el oeste de Irak y en Siria.

Los yihadistas perpetran una masacre sin precedentes contra la minoría religiosa yazidí en la comarca iraquí de Sinjar en los primeros días de agosto de 2014. Unos 5.000 hombres son ejecutados de forma sumaria, mientras que miles de mujeres son secuestradas, convertidas en esclavas sexuales, y sus niños son raptados. Cerca de 3.000 siguen en paradero desconocido. Millones de personas huyen de sus hogares.

El grupo se da a conocer al mundo con sus vídeos de decapitaciones de periodistas, comenzando por el del periodista estadounidense James Foley en agosto de 2014. La primera respuesta de los bombardeos de Washington llegarían un mes después. EEUU y otros 72 países fundan la coalición internacional contra el ISIS en octubre de 2014 y comienza su campaña contra la organización.

Los atentados yihadistas exportan el terror a Europa, y también a EEUU y Turquía, a partir de enero de 2015, con el asalto al semanario francés "Charlie Hebdo", un atentado al que le seguirían el de la discoteca parisina de Bataclan y otros ataques en Bruselas, Niza, Manchester o Barcelona.

Tres ofensivas contra el terror

De forma paralela se comienzan tres ofensivas terrestres contra el ISIS. El Ejército de Irak, con el apoyo de milicias chiíes logra recuperar Tikrit en marzo de 2015 y prosigue su campaña hacia el norte, también con el apoyo del Ejército kurdo-iraquí, los peshmerga.

En octubre de ese año, los kurdos y los árabes sirios crean las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), armadas, entrenadas y secundadas en el terreno por tropas de EEUU. Inician una ofensiva en el norte del país, con el apoyo de los bombardeos de la coalición internacional, cuyos ataques no habían hecho mella en los avances territoriales hasta que el ISIS se había encontrado con un rival que no parecía temer sus atrocidades, las kurdas YPG, el pilar de las FDS, que resistieron durante seis meses –con respaldo de EEUU, del propio Ejército sirio, combatientes del PKK, rebeldes del ELS, peshmerga y voluntarios internacionalistas– a los yihadistas en Kobane, en un frente que a comienzos de 2015 marcó la máxima expansión del ISIS.

Al mismo tiempo, el Ejército sirio, apoyado por Rusia, mantiene duras batallas en el centro del país. Recupera y después pierde ciudades como Palmira y Al-Raqqa, en 2016.

La batalla de Mosul, la más dura de la guerra, se extiende entre octubre de 2016 y julio de 2017 y en octubre cae Al-Raqqa ante las FDS tras tres meses de combates. En tres meses el ISIS ha perdido sus dos capitales, pero con un gran coste de vidas civiles.

Irak anuncia la victoria sobre el ISIS el 9 de diciembre de 2017, miles de yihadistas se refugian en Siria, donde continúan las ofensivas de Damasco y de las FDS.

Las fuerzas kurdo-árabes de las FDS reactivan la ofensiva contra el ISIS en el valle del Éufrates en setiembre de 2018 y en febrero de 2019 acorralan a los extremistas en Al-Baghuz.

En las semanas siguientes, la operación militar se detiene varias veces para permitir la evacuación de decenas de miles de civiles que permanecen en la localidad. La ofensiva concluyó el sábado con la conquista del último reducto yihadista en Al-Baghuz.

No obstante, los expertos y los mandos de la coalición internacional consideran que combatientes de ISIS se dispersaron en las regiones desérticas de Siria y esperan su momento para resurgir.