La prueba ha estado marcada por el intenso calor, con picos de hasta 36 grados, que ha hecho más duro el exigente circuito integrado hasta por cinco pasos por el alto de Abaltzisketa, el último de ellos muy cerca de la línea de meta.

Movistar, que ha comparecido con la baja a última hora del gran favorito al triunfo final, el ecuatoriano Richard Carapaz, ha tratado de controlar la carrera al contar con bazas para disputar el triunfo, como a la postre se ha confirmado.

Fiel a lo que ha venido ocurriendo en anteriores ediciones, enseguida se han formado grupos que han intentado eludir el férreo control de los líderes del pelotón, el más importante uno de siete corredores, liderado por el portugués Joao Rodrigues, con Veloso y Serrano muy activos, que ha rodado muchos kilómetros en colaboración.

El pelotón ha cazado, como estaba previsto, a todos los fugados porque Movistar y Murias han estrechado vínculos atrás y, después de tres horas de dura carrera, se ha formado un grupo para la disputa de la última vuelta al circuito compuesto por unos 30 corredores, con Valls entre ellos.

Joao Rodrigues de nuevo lo ha intentado a falta de 20 kilómetros para meta con Rubén Fernández, ataque que nadie ha podido seguir y que parecía dejar a ambos ciclistas en disposición de jugarse la carrera, aunque el pelotón ha reaccionado y les ha alcanzado a diez kilómetros para el final.

Rafa Valls, en el recorrido rompepiernas hasta la meta, ha lanzado su ataque a escasos kilómetros para la conclusión, con un pelotón ya muy maduro e incapaz de seguir al valenciano. Tras él ha entrado, a 28 segundos, Jesús del Pino (Vito-Feirense) y, en el mismo tiempo, Juan Antonio López (Basque Country-Murias), tercero.