I.BIZKARGUENAGA-I.IRIONDO
BILBO-GASTEIZ

Urkullu y Ortuzar piden disculpas pero exculpan al PNV de «actos particulares»

El lehendakari y hace diez años presidente del EBB, Iñigo Urkullu, y su sucesor, Andoni Ortuzar, coincidieron ayer, hasta en la hora, en pedir «disculpas» por « quienes han actuado de esta manera tan censurable», y en precisar que el objeto de las condenas son «actos particulares» que no están relacionados con la actuación del PNV.

El lehendakari, Iñigo Urkullu, que era presidente del EBB cuando se produjeron los hechos que han dado lugar a las condenas del «Caso De Miguel», se apresuró ayer a comparecer ante los medios para lanzar un mensaje de «tolerancia cero con la corrupción» y «solicitar disculpas a la sociedad por una actitud reprobable y contraria a los valores éticos que defendemos», aunque insistió en que fueron «actos particulares». Es inusual que el lehendakari reaccione a sentencias judiciales y, en este caso, la respuesta estaba convocada de víspera.

A la misma hora, en Sabin Etxea, el actual presidente del EBB, Andoni Ortuzar, dedicó la mayor parte de su valoración de la sentencia condenatoria del «Caso De Miguel» a acotar la responsabilidad y a sostener que su partido nada tiene que ver con los hechos enjuiciados. Pese a ello, también pidió perdón a la sociedad vasca porque en el seno de la formación jeltzale «haya podido haber quienes han actuado de esta manera tan censurable».

Urkullu: «Tolerancia cero»

Iñigo Urkullu, desde Lehendakaritza, compareció para lanzar un mensaje de «tolerancia cero con la corrupción». Aseguró que cuando se produjeron las detenciones de varios de los imputados y ahora condenados, entre ellos Alfredo de Miguel, diputado foral de Administración Local y número dos del ABB, el PNV actuó con «celeridad, claridad y contundencia».

«Celeridad» –explicó– porque desde el principio se les exigió que dejaran sus cargos públicos y también el carné del partido. Los principales hoy condenados tardaron meses en dejar la afiliación. Añadió que lo hicieron también con claridad ante la ciudadanía y con una «contundencia» que quisieron fuera «ejemplarizante».

Iñigo Urkullu explicó que su preocupación como presidente del EBB era que «las acciones particulares» de estas personas «pudieran vincularse a un partido con una trayectoria intachable». Ahora insiste en que «la sentencia deja claro que actuaron en beneficio particular».

De todas formas admitió que «pudieron valerse de su posición para lucrarse indebidamente». E insistió en que «repruebo esa actitud. Tolerancia cero con la corrupción».

Ortuzar: Día triste para el PNV

En un día que calificó de «triste» para su partido, Andoni Ortuzar compareció ante los medios con gesto circunspecto para valorar una sentencia que toca directamente la línea de flotación jeltzale. El presidente del EBB quiso desligar al PNV de los actos atribuidos a quienes fueron altos cargos políticos e institucionales jeltzales y que pudieron hacer lo que hicieron por serlo.

En el turno de preguntas, Ortuzar afirmó que no tiene «en la memoria» que «nadie [desde el PNV] haya defendido a las personas» sino la presunción de inocencia. Sin embargo, en enero del año pasado, el portavoz parlamentario del PNV, Joseba Egibar, además de expresar su solidaridad con los encausados –hoy condenados– por los «ocho años de calvario» que habían pasado, emplazó a ver «qué da de sí» el proceso. «Creo que las personas que conozco, hasta la información que yo manejo, son inocentes», afirmó el presidente del GBB.