
En su nota, Fenin enumera cinco tipos de test, agrupados en tres bloques: ARN, inmunológicos y rápidos.
1 - Test de ARN: Utilizan una muestra nasofaríngea que se analiza en un laboratorio. Incluye los PCR y otros test de ácidos nucleicos. Con esta prueba se detecta la presencia de material genético del virus, y ofrece muy buena sensibilidad y especificidad.
2 - Test inmunológico para antígenos: También se realizan a partir de una muestra nasofaríngea analizada en el laboratorio. Estos detectan proteínas del virus, que son una prueba de que la infección está activa.
3 - Test inmunológico para anticuerpos: Estos se llevan a cabo con una muestra de sangre, que se analiza en un laboratorio. No se centra en el virus en sí, sino en los anticuerpos producidos frente al virus a los 7 días aproximadamente desde los síntomas. Su presencia es una prueba indirecta de inmunidad, de que la enfermedad está activa o de que ha sido pasada.

4 - Test rápido para antígenos: Pueden llevarse a cabo con equipos portátiles y los resultados pueden conocerse a los 10-15 minutos. Al igual que en el test inmunológico para antígenos, se toma una muestra nasofaríngea y detecta proteínas del virus.
5 - Test rápido para anticuerpos: Se toma una muestra de sangre y detecta los anticuerpos a los 7 días aproximadamente desde los síntomas. Es una prueba indirecta de inmunidad o de que la enfermedad está activa o pasada. Sus resultados también están disponibles en 10-15 minutos.
Los test inmunológicos son cuantitativos, es decir, nos dan un número determinado respecto a la presencia del virus, por lo que son más exactos que los test rápidos, que son cualitativos, nos dicen si un resultado es positivo o negativo.

La autopsia confirma el crimen machista en Barakaldo; detenido un hombre de 27 años
‘Gutun bat Kottori’: «Gazteoi dagokigu gai hau bertze modu batera lantzea»

«Gizarte aldaketa handi bat» eskatu du Miribillan bildutako euskararen komunitateak
Localizada la joven de 23 años desaparecida desde el día 25 en Donostia





