Jon Ormazabal

No habrá turrón ni champán en el menú navideño de Erik Jaka, Altuna sí se permitirá algún extra

Elección muy rápida y sin ningún tipo de quejas de cara a la final del Cuatro y Medio del domingo, partido en la que ambos quieren llevar la iniciativa en el juego y jugar lo más rápido posible.

Jaka y Altuna han apartado el material de la final muy rápido. (Gorka RUBIO/FOKU)
Jaka y Altuna han apartado el material de la final muy rápido. (Gorka RUBIO/FOKU)

No es nada habitual jugarse uno de las txapelas más preciadas de la temporada en pleno periodo navideño, una de las épocas en las que más complicado resulta mantener las rutinas habituales del resto del año, pero este año y este calendario tan apretado obligan a tener que amoldarse. Tener que jugar esta final ante el mismo rival y en el mismo escenario que hace tres semanas se disputaron el Manomanista hace aún más peculiar estos días previos a la gran cita y, por sus declaraciones, Erik Jaka y Jokin Altuna parecen afrontar estos días previos con diferentes estrategias.

Sin descuidar lo más mínimo los entrenamientos, mañana mismo tienen prevista una sesión física, el campeón Manomanista tiene en mente salirse lo más mínimo de su rutina habitual, repetir el plan que lo llevó a lo más alto del escalafón manista, mientras que Jokin Altuna lucha para superar el duelo que le supuso la derrota ante su gran amigo hace tres semanas y se permitirá alguna pequeña licencia como «cenar mañana con la familia» y compartir algún tiempo con una cuadrilla con la que apenas ha estado en los últimos meses. El de Amezketa está empeñado en tratar de «disfrutar» de estos días previos a la final, algo que reconoce, «no siempre he conseguido».

El de Lizartza, por su parte, intentará no distraerse lo más mínimo de su objetivo, que no es otro que volver a calarse la txapela. «Personalmente la Navidad no me va a trastocar nada, tengo que estar centrado en el partido del domingo. Si no tuviera esta final tampoco haría grandes cosas pero, teniendo esta oportunidad, mucho menos me cuidaré», ha afirmado.

Juntarse con el aita, con el que en estos tiempos de pandemia acostumbra a no compartir cenas y comidas será el único extra del menú navideño de Erik Jaka en el que «no habrá turrón ni champán, si eso el domingo ya habrá algo».

Elección rápida

Por lo demás, la elección volvió a ser muy tranquila y de guante blanco. Ambos quedaron muy satisfechos con lo encontrado en el cestaño y apenas tardaron en apartar el material con el que se disputarán la txapela. Ambos saben que llevar la iniciativa en el juego y jugar a los pies de su rival, sin darle tiempo a reaccionar, será una de las claves para hacerse con la victoria.