El Departamento de Salud de Lakua iniciará mañana en el Hospital Universitario de Cruces la vacunación contra la covid-19 de los profesionales de Osakidetza, a quienes empezará a administrar la vacuna de Moderna.

Tras recibir y verificar este jueves las primeras 1.400 dosis de la vacuna de Moderna, durante el día de hoy se ha estructurado la organización para administrarlas este viernes en el hospital vizcaino.

Está previsto que en los próximos días se administre la mitad de las dosis recibidas de Moderna (700) a profesionales de los servicios de las Unidades de Cuidados Intensivos de diferentes organizaciones de Osakidetza, según ha informado el Departamento de Salud.

La vacuna de Moderna, la segunda autorizada en Europa, también necesita de dos dosis, con un intervalo en este caso de 28 días, por lo que se va a seguir la misma estrategia que con la de Pfizer, reservando la mitad de las vacunas para administrarlas por segunda vez, según señaló ayer en el Parlamento de Gasteiz la consejera de Salud, Gotzone Sagardui.

La entrega de las vacunas de Moderna, cuya efectividad es menor en mayores de 65 años, se llevará a cabo cada dos semanas, hasta alcanzar las 24.900 dosis en la CAV entre enero y febrero.

Estas vacunas necesitan para su conservación una temperatura menor que las de Pfizer, entre -20 y -28 grados, son más sensibles a las condiciones de transporte y más efectivas para los menores de 65 años, por lo que Salud ha decidido que sirvan para iniciar la vacunación de los profesionales de Osakidetza.

Vacunación progresiva en Nafarroa

Osasunbidea también ha adelantado a este viernes el inicio de la vacunación a los profesionales sanitarios, tanto de centros públicos como privados, un proceso sistemático y general que alcanza a más de 18.000 personas, y que se iniciará de forma simultánea en Refena y fuera de Iruñerria, gracias a diez equipos móviles.

El Gobierno de Nafarroa señala en una nota que comienza así la segunda fase de la estrategia global y el plan operativo de vacunación que, en las próximas semanas, coincidirá con la actuación que se está desarrollando en los centros sanitarios y la que está prevista iniciar en el colectivo de grandes dependientes no institucionalizados, que agrupa a 7.000 personas.

Este solapamiento permitirá rentabilizar el despliegue operativo, que movilizará, a partir del lunes, a un número importante de equipos móviles, unidades de vacunación y otros profesionales dedicados a vacunar.

El proceso en el ámbito sanitario se llevará a cabo de forma progresiva y priorizada, comenzando por los profesionales que se encuentran en primera línea de la lucha frente al virus, y teniendo en cuenta cuestiones logísticas, geográficas y otras circunstancias de este sector variado y amplio.

La inmunización comenzará por profesionales de Atención Primaria y hospitales, tanto públicos como privados. Este grupo suma ya 16.000 personas entre Osasunbidea, Salud Mental, Clínica del Opus, Hospital San Juan de Dios y Clínica San Miguel.

También se está abordando la planificación de la administración de las dosis entre las empresas subcontratadas y otros profesionales del ecosistema sanitario y sociosanitario agrupados en colegios profesionales, trabajadores que ejercen de forma autónoma en consultas así como otros agentes sanitarios, etc. Esta fase finalizará el 22 de marzo.