NAIZ

El presentador bilbaino José María Iñigo falleció por el amianto de los estudios de RTVE

Una sentencia judicial ha confirmado las sospechas de la familia: el famosísimo presentador de televisión José María Iñigo falleció por una enfermedad consecuencia del amianto que revestía los estudios de RTVE. Nacido en Bilbo en 1942, murió en 2018.

Iñigo, en un programa de televisión en los 70. (RTVE)
Iñigo, en un programa de televisión en los 70. (RTVE)

El Juzgado de lo Social número 2 de Madrid ha reconocido que la pensión de viudedad de la esposa de José María Íñigo deriva de enfermedad profesional debido a la exposición del conocido presentador al amianto durante su relación laboral con RTVE.

Nacido en Bilbo en 1942, Iñigo desarrolló su carrera profesional primero en Londres, en el ámbito de la música, y luego en Madrid. Fue uno de los principales comunicadores del Estado durante varias décadas, hasta su fallecimiento a los 75 años.

Había comenzado a trabajar en Radio Bilbao, e incluso se recuerda que participó en una becerrada organizada por la emisora en la plaza de Vista Alegre, a principios de los 60. Ya en los 80, durante una breve temporada tuvo un programa en ETB-2.

La sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, admite a trámite la demanda de los herederos de Íñigo y señala que existen «elementos sólidos» para afirmar que el fallecimiento del presentador, que tuvo lugar en 2018, fue consecuencia de la exposición al amianto durante la primera etapa de su relación profesional con RTVE en la que prestó servicios en el Estudio 1, entre los años 1975, 1976, 1978 a 1981 y 1982 a 1985.

La exposición a ese mineral utilizado en la construcción, según el fallo, conllevó que desarrollase con posterioridad y dentro del periodo de latencia un mesotelioma maligno pleural, un tumor canceroso poco común con una relación «muy importante» con la exposición al amianto, del que fue diagnosticado en 2016, y que fue la causa de la muerte.

El proceso lo inició el propio José María Íñigo antes de fallecer y lo continuó su familia que presentó una demanda contra la Corporación de Radio y Televisión Española, Mutua Fraternidad Muprespa, Instituto Nacional de la Seguridad Social y Sociedad Española de Radiodifusión S. A.

Como recuerda el fallo, Íñigo trabajó en los programas de RTVE "Directísimo", "Fantástico" o "Estudio Abierto", entre otros, que se grabaron en el Estudio 1 de Prado del Rey.

Según la sentencia, una gran parte de los edificios de ese complejo se edificó en los años 70 y 80 y se recurrió a un aislamiento de amianto para su acondicionamiento acústico. Con posterioridad, ese material se consideró agente cancerígeno, por lo que ya desde 1986 RTVE emprendió su retirada.

La variedad de amianto utilizada en el Estudio 1 pertenece al grupo de materiales friables, que puede ser disgregado o reducido a polvo con la sola acción de la mano. Estos materiales, según el fallo, son susceptibles de liberar fibras como consecuencia de choques, vibraciones o movimiento de aire.

Las ovaciones, el ruido, aplausos y música provocaban vibraciones en la estructura del plató y se producía la caída de polvillo cristalino sobre las cámaras, el ciclorama y el público, que exigía su limpieza.

En los años 2003 y 2005 se toman muestras ambientales que si bien no superaban los límites de exposición ambiental, concluyeron con la necesidad de desamiantar.

En 2011, RTVE acordó desamiantar varios edificios, entre ellos el estudio 1, 2 y 3, y derribar otros.

Esta resolución no es firme y contra ella cabe la interposición de un recurso de suplicación ante la Sala de lo Social del TSJ de Madrid.

En Hego Euskal Herria en los últimos 20 años se han constatado 825 muertes derivadas del amianto, aunque esa es solo seguramente la punta del iceberg.