Juanjo BASTERRA

MESOTELIOMA: LA VERSIÓN LETAL MÁS RÁPIDA DEL AMIANTO

Bizkaia concentra la mitad de las muertes producidas por el mesotelioma, un cáncer letal, derivado de inhalar amianto. En Hego Euskal Herria en 20 años se han producido 825 muertes, que habría que multiplicar por 10 para establecer el daño total del amianto.

Cuando se produjo el desastre humano y medioambiental en el vertedero de Zaldibar afloró el drama del amianto. Mucha gente percibió de cerca esa consigna de «el amianto mata» y enseguida se suspendieron los trabajos hasta no disponer de los equipos de protección adecuados. No es para menos.

Hace unas semanas el INE ofreció a GARA los datos de las estadísticas de defunciones por mesotelioma por provincias desde 1999 a 2018. Este tipo de cáncer es la versión letal más rápida del amianto, aunque no la única, una vez que «ha explotado» y ha estado en el cuerpo humano entre 20 y 50 años. Haber convivido en ambientes con amianto en la vida laboral, en el medio ambiente o en las viviendas con la limpieza de los buzos, por ejemplo, significa ser candidato a una patología cancerígena.

Entre 1999 y 2018, último fecha oficial cerrada, según el INE, en Hego Euskal Herria fallecieron 825 personas por este motivo, mientras que en el Estado español fueron 6.987. Uno de cada cuatro mesoteliomas (24,86%) afectó a mujeres.

En el Estado, la evolución de las muertes en esas dos décadas muestra un aumento de un 91,55%, y en Araba, Bizkaia, Gipuzkoa y Nafarroa el incremento es de un 31,58%. Lo que indica que el cáncer más letal sigue aumentando su incidencia.

Ahora bien, las muertes por mesotelioma no suponen la totalidad de las que se producen por haber estado en contacto con el amianto sin las medidas adecuadas de protección durante la vida laboral, porque existen otras patologías como la asbestosis, los cánceres de pulmón, de laringe y de ovario, o algunos adenocarcinomas que también pueden llevar a la muerte. Pero las estadísticas de estas causas aparecen diluidas en la incidencia sobre la salud.

De hecho, José Miguel Sanz Anquela, médico anatomopatólogo del hospital de Alcalá de Henares, reconoce a GARA que las muertes por mesotelioma habría que «multiplicarlas por 10 o 15 veces» para «contar con un volumen total de las muertes por amianto». Según esa tesis, en Hego Euskal Herria en los últimos veinte años (1999-2018) habrían fallecido por amianto no menos de 8.250 personas. Son algo más de 400 al año, que suponen, solo con esta patología, más de ocho veces las muertes por accidentes laborales. En el Estado español sumarían un total de 70.000 muertes por amianto, extrapolando los datos del médico del hospital de Alcalá de Henares. Esa cifra seguirá aumentando, porque se espera que hasta 2040 sigan produciéndose muertes por haber inhalado fibras del mineral cancerígeno.

Bizkaia: la mitad de las muertes

La mortalidad en Hego Euskal Herria demuestra que allí donde la industria ha tenido un papel más intenso es donde más amianto se ha utilizado. Así, el 49,7% de las muertes se produce en Bizkaia, seguida de Gipuzkoa, con un 22,06%. Nafarroa acumula el 21,57% y Araba, el 6,67%.

Además, Bizkaia, Gipuzkoa y Nafarroa se encuentran, en el marco del Estado español, entre los territorios con mayor número de muertes por este tipo de cáncer entre 1999 a 2018. En los dos primeros puestos se hallan Barcelona (1.370 muertes) y Madrid (932). Les sigue Bizkaia (410), y después Valencia (347), Alacant (243), Sevilla (226), Murcia (210), Gipuzkoa (182), Cádiz (181), Nafarroa (178) y A Coruña (175) .

En el Estado francés, por otro lado, en un informe firmado, entre otros, por el experto en neumonología y patologías del trabajo Jean-Claude Pairon, se advierte sobre una clase de los mesoteliomas, los pleurales. Dice que «continúa aumentando» su incidencia, «con una duplicación de casos nuevos por año desde 1998». Y otro dato: en la región de Nueva Aquitania –donde está integrada Ipar Euskal Herria– la tasa de incidencia de los mesoteliomas pleurales se duplica entre las mujeres en el periodo 2013-2016, frente a los hombres que se redujo un 3,67%.

En Europa, según la Comisión Internacional de Medicina del Trabajo (ICOH, en inglés), el amianto se cobra 88.000 vidas cada año. A nivel mundial, la OMS mantiene que 107.000 trabajadores fallecen cada año, aunque expertos internacionales, entre los que se encuentra Jukka Takala, exdirector de la Agencia Europea para la Seguridad y Salud en el Trabajo, elevan el número a 255.000.