El cura de la parroquia de Cristo Rey de Iruñea, José María Aícua, ha fallecido de un infarto mientras oficiaba un funeral sin que se pudiera hacer nada por el sacerdote, que esa tarde había oficiado ya otro funeral, según fuentes del Arzobispado.
Aícua, natural de Caparroso, ha sido durante años unos de los organizadores de las Javieradas, según recuerdan. Actualmente era párroco de San Francisco Javier y Cristo Rey.
Tras conocer su muerte, el arzobispo de Iruñea y obispo de Tutera, Francisco Pérez, ha enviado un mensaje a todos los sacerdotes de la archidiócesis en la que les comunicaba que «por más que han intentado los médicos reanimarle y ayudarle en todo, no ha podido ser».