Una de las principales virtudes del Zinemaldia es la falta de prejuicios, tanto con Diego Galán como después con Rebordinos, y nunca ha habido problemas para incluir películas consideradas de género. ‘La abuela’ (2021) fue programada en Donostia dentro de la sección oficial a sabiendas de que iba a acudir también al Festival de Sitges, en cuanto certamen más especializado en terror.

Pero si hay que hablar de normalización, se ha de entender también que los géneros permiten licencias autorales de todo tipo, y no digamos ya el terror, con toda su carga simbólica y fantástica.

Esto queda de manifiesto en la nueva realización de Plaza desde el momento en el que el guion ha sido escrito por Carlos Vermut, que viene del cine de autor. La idea de la película, no obstante, siempre fue original de Plaza, que quería hacer una ficción sobre la vejez y sus traumas, cada vez más palpables y acuciantes en la sociedad moderna.

El paso del tiempo en relación a la pérdida de la belleza es un elemento clave y, en consecuencia, la protagonista es una modelo que ve interrumpida su carrera en París cuando debe regresar a Madrid para cuidar de su abuela enferma. No por casualidad el papel de la anciana es encarnado por la modelo brasileña Vera Valdez, que fuera musa de Coco Chanel y que comparte cartel con la pujante Almudena Amor.