Dabid Lazkanoiturburu

Soldados rusos y ucranianos combaten casa por casa en Mariupol

Tras una andanada de bombardeos sin parangón, y con Kiev reconociendo que no puede enviar refuerzos, las tropas rusas se acercan al centro de Mariupol tras un ataque en pinza por tres flancos y luchan casa a casa. Según algunas agencias, Rusia habría instado para rendir la ciudad.

Imagen por satélite de bloques bombardeados en Mariupol.
Imagen por satélite de bloques bombardeados en Mariupol. (AFP)

Tropas rusas y milicianos pro-rusos del Donbass luchan casa por casa en el centro de Mariupol, ciudad portuaria de la rebelde provincia de Donetsk, contra los soldados ucranianos, milicianos del ultra batallón de Azov y civiles que se han unido a la resistencia como voluntarios.

Según han indicado algunas agencias, como Reuters y Efe, que citaba a Mijaíl Mizintsev, jefe del Centro de Control de la Defensa Nacional de Rusia, los gobernantes de la ciudad tienen de plazo hasta primera hora de este lunes para rendirse y ceder el control a las tropas rusas.

El Gobierno de Kiev admitió la madrugada del domingo que los rusos tomaron el control del puerto de Mariupol, en el sureste del país, con lo que Ucrania ya ha perdido el acceso al Mar de Azov.

El Ejecutivo confirmó asimismo ayer que no tiene posibilidad de reforzar la defensa de la ciudad de Mariúpol, fuertemente atacada por tierra, aire y mar, por el Ejército ruso.

Olexij Arestowytsch, asesor del presidente Volodimir Zelensky, dijo que los refuerzos más cercanos están a más de 100 kilómetros de distancia o ya involucrados en luchas con el enemigo.

«Actualmente no hay una solución militar para Mariupol. No es solo mi opinión, es también la opinión de los militares», dijo resignado.

La toma de la ciudad por los rusos permitiría conectar a las tropas que avanzan desde la anexionada península de Crimea con las columnas, que incluyen a los rebeldes del Donbas, que avanzan desde el este.

Enviados especiales del diario 'Le Monde' en Odesa (sur) aseguraban que, desde la madrugada del sábado, las tropas rusas iniciaron el avance en pinza hacia el centro de la ciudad.

Con la cobertura insistente de bombardeos, hasta un centenar diarios, las tropas rusas avanzaron desde el este hacia la ribera izquierda del río tras destruir totalmente la zona, incluida  la planta metalúrgica de Azovstal, una de las más grandes de Europa y joya de la economía estatal, que era utilizada por el Ejército ucraniano como base de retaguardia.  
El segundo avance en pinza llegaba del nordeste y tenía como objetivo Ilitcha, otra fabrica metalúrgica convertida en improvisado cuartel militar ucraniano.

El tercer ataque provenía del oeste y logró entrar en la ciudad, de 350.000 habitantes, por Port City, un gran centro comercial totalmente destruido por los combates.

Las tropas rusas abrían así la vía hacia la «Plaza de la Libertad»,  en el límite del centro de la ciudad, y a kilómetro y medio del Teatro Dramático, bombardeado el pasado miércoles y en el que, según fuentes ucranianas, se refugiaban un millar de civiles y fueron rescatadas con vida 140.

Denuncian bombardeos a civiles

El Ministerio de Defensa ruso negó cualquier tipo de implicación en lo ocurrido y acusó directamente al Batallón Azov de ser responsable de esta «nueva provocación sangrienta». Tras el bombardeo de un hospital infantil la semana pasada en la misma ciudad, aseguró que era en realidad un cuartel de las milicias ultras. Cuando se publicaron fotos de madres y niños saliendo del lugar –una, embarazada, sucumbió a sus heridas–, aseguró que eran actrices.  

E Ayuntamiento de Mariupol ha denunciado un ataque ruso el sábado contra la Escuela de Arte G12, situada en la devastada margen izquierda de la ciudad, y que servía de refugio a más de 400 personas, muchas de las cuales se encontrarían todavía bajo los escombros.

Además,  testimonios de familiares y tutores de un sanatorio denuncian haber perdido contacto con 19 menores, la mayoría huérfanos, en medio de los combates.

Otros testimonios aseguran que nadie puede salir de la ciudad, con cadáveres que se pudren desde hace días en las calles, sin comida, agua, luz y calefacción con una población refugiada en sótanos con noches con temperaturas bajo cero

Evacuaciones ayer

Ucrania y Rusia han anunciado la evacuación el sábado de 14.000 personas, entre ellas 4.100 personas por avión desde Mariupol a Kiev y medio millar por el corredor humanitario hacia Zaporiya, aún bajo control ucraniano.
 
Moscú asegura más de 7.000 personas fueron evacuadas en el último día a Rusia desde Donetsk y Lugansk, así como desde otras partes de Ucrania.

El ayuntamiento de Mariúpol denunció que las tropas rusas estarían evacuando a los residentes de la ciudad hacia territorio ruso en contra de su voluntad.

Rusia sostiene que hasta 2,7 millones de ucranianos estarían pidiendo una evacuación de Ucrania a Rusia y que son retenidos contra su voluntad.