Cerca de medio centenar de asociaciones vecinales y diversos colectivos culturales, sindicales o ecologistas de Donostia han convocado para este sábado una manifestación bajo el lema «¡Por un cambio de modelo, recuperemos la ciudad!». La marcha arrancará a las 18.00 desde el Parque de Araba y finalizará en Alderdi Eder.

Representantes de los grupos convocantes han comparecido esta mañana junto al Ayuntamiento –ediles de EH Bildu y Elkarrekin Donostia les han mostrado su respaldo– para dar a conocer los motivos de esta movilización que denunciará «las nefastas políticas urbanísticas» impulsadas por el Gobierno municipal que lidera Eneko Goia. «Las decisiones importantes que afectan a las y los donostiarras son tomadas en función de intereses económicos privados», han remarcado.

Entre las consecuencias de estas políticas han citado el aumento de los precios de la vivienda, tanto de compra como alquiler, debido a que «no se ponen límites a los fondos buitre y al mercado turístico para especular». Ello ocasiona que sigan los desahucios y que la gente con menos recursos esté siendo «expulsada» de su ciudad.

También han criticado la gestión del espacio urbano, dando prioridad a los intereses comerciales frente a «las actividades de cuidado, juego y relaciones sociales», con el riesgo de que algunos barrios –el ejemplo más evidente es Alde Zaharra– se conviertan en «simples espacios de consumo y ocio». Este modelo genera, a su juicio, una «elitización» de Donostia, ya que permite «acumular la riqueza en pocas manos».

Y es que «la sobreexplotación turística supone un empeoramiento de las condiciones laborales. Se ha desequilibrado la estructura económica de la ciudad, guiada únicamente por el beneficio a corto plazo».

Metro, Culinary, hoteles, centros comerciales…

Los convocantes también ponen el foco en una serie de «políticas urbanísticas agresivas», entre las que han nombrado la construcción del metro, el «expolio de patrimonio público en Manteo para el Culinary Center», la «incesante»« apertura de hoteles y alojamientos turísticos, la ampliación de grandes centros comerciales (Garbera) o proyectos como Belartza o Antondegi que «destruyen los entornos naturales».

Al mismo tiempo se produce una «destrucción del patrimonio arquitectónico», causada por la «creciente presión inmobiliaria o turística», como en el caso del Bellas Artes.

Ante este diagnóstico, estos colectivos han destacado la importancia de «reunir las energías suficientes para hacer frente a las políticas que entregan la ciudad a las fuerzas del mercado y reorientar el modelo». En ese camino, llaman a tomar parte en la manfestación de este sábado.