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Mercedes celebra una consulta marcada por la presión de la dirección y la división sindical

Las 5.000 personas que forman la plantilla de Mercedes Benz están llamadas a votar este lunes sobre el preacuerdo alcanzado la semana pasada entre la dirección y los sindicatos CCOO, UGT, Ekintza y PIM. ELA, LAB y ESK rechazan la propuesta porque no se vinculan los salarios al IPC.

Manifestación celebrada con motivo de la huelga del 6 de julio.
Manifestación celebrada con motivo de la huelga del 6 de julio. (Marisol RAMÍREZ FOKU)

Los trabajadores y las trabajadoras de la planta que Mercedes Benz tiene en Gasteiz han empezado a votar presencialmente a partir de las 10.15 de la mañana en el referéndum sobre el precuerdo del convenio alcanzado por la dirección de la empresa y los sindicatos CCOO, UGT, Ekintza y PIM. La polémica vía telemática está abierta desde las 00.00 horas y un 10% de la plantilla se ha inscrito para ejercer su voto por esa fórmula, criticada por ELA, LAB y ESK, los tres sindicatos piden el ‘no’.

A lo largo de este lunes, los casi 5.000 empleados de la planta alavesa deberán decantarse por ‘Acuerdo sí’ o ‘Acuerdo no’, las dos opciones que se recogen en la consulta, que llega después de una movilización histórica en la que se han registrado nueve jornadas de huelga que han paralizado la producción en la factoría.

Para la votación presencial, se han distribuido 22 urnas por toda la fábrica y hay diferentes horas establecidas por turno para poder votar en la consulta. En concreto, y dentro del turno de mañana, han ejercido su derecho a voto hasta las 13.00 horas. En el turno de tarde, será de 18.15 hasta las 21.00 horas, y por la noche se podrá votar de 00.15 a 4.00. La aplicación para votar telemáticamente estará operativa hasta las 00.00 horas de esta noche.

¿Qué se vota este lunes?

Así, habrá que esperar hasta el martes para conocer el resultado de la consulta, en la que la plantilla deberá pronunciarse sobre el preacuerdo del convenio, con vigencia 2021-2026. No recoge la sexta noche que pretendía implementar la dirección y, en materia salarial, plantea un incremento consolidado de un 6% para este año. De 2023 a 2026 prevé un aumento consolidado anual de un 2,25%, y una nueva paga de 1.000 euros al año.

A ello se añaden otras primas que se cobrarán en función del cumplimiento de objetivos, según los firmantes: una paga de resultados de hasta 2.250 euros al año y otra de 500 euros anuales si la producción supera los 200.000 vehículos al año.

El acuerdo establece que los sábados se convocarán diez días antes del fin del mes previo y se trabajarán por norma general. También se contempla la jubilación demás de 250 personas a través de contratos relevos para aquellos que cumplan con las condiciones.

Asimismo, se producirá la conversión de 400 contratos temporales en indefinidos (150 a la firma del convenio) y se prevén puestos protegidos para 150 personas con limitaciones acreditadas por Servicios Médicos de Fábrica.

ELA, LAB y ESK alegan como una de las razones de su rechazo que no se vinculan las subidas salariales al IPC que, según los últimos datos del INE, presenta un incremento anual del 9,6% en la CAV y del 10,2% en Nafarroa.

Este ha sido el argumento de peso que esgrimido en las nueve jornadas de huelga convocadas durante las últimas semanas que, según los convocantes, han sido secundadas por el 95% de la plantilla de talleres.

Amenazas de la dirección

El amplio seguimiento de los paros evidencia que muchos trabajadores no comparten lo firmado por la mayoría sindical, lo que suscita dudas sobre el resultado final. La empresa, por su parte, ha tratado de presionar a la plantilla, vinculando a la firma del convenio una posible inversión de 1.200 millones de euros.

Es más, la semana pasada el director de la planta, Emilio Titos, dijo que si los empleados no avalan el preacuerdo supondrá «claramente una apuesta hacia el precipicio. El inicio del fin del crecimiento».

A la presión de la dirección se suma la de algunos dirigentes políticos, que han criticado la movilización sindical. Este mismo lunes, el coordinador del grupo parlamentario del PNV, Iñigo Iturrate, ha puesto en valor el preacuerdo y ha advertido de que «hay que saber aprovechar las circunstancias».

En una entrevista a Onda Vasca, recogida por Europa Press, el dirigente jeltzale ha remarcado que «parece un buen acuerdo, que garantiza los derechos de los trabajadores y que va a dar estabilidad a una empresa de la importancia de Mercedes».

"Es un buque insignia en Euskadi y un acuerdo sería una buena noticia para este país. Confío en que los trabajadores, en el ejercicio de su libertad, decidan lo que consideran mejor para sus intereses, pero hay que saber aprovechar las circunstancias cuando hay un buen acuerdo que llega en un momento delicado de cara al futuro», ha indicado.