Un decreto municipal dado a conocer este lunes 8 de agosto por el Ayuntamiento de Angelu ha establecido que este mismo día se cerrarán los terrenos boscosos de la Pignada y Lazaret, hasta nueva orden. La fuerte sequía y las previsiones meteorológicas de altas temperaturas han sido las impulsoras de dicha decisión, tomada en concertación con la Oficina Nacional de Bosques, debido al «riesgo máximo para el comienzo de fuego que acarrea la situación actual».

Se trata del tercer cierre este verano, tras uno en junio y otro a mediados de julio. El Consistorio tiene especial cuidado, tras el incendio que tuvo lugar el 30 de julio hace dos años, y que arrasó 165 hectáreas de bosque urbano de la Pignada. También ese año las condiciones meteorológicas eran adversas: el día del incendio hizo 40º C, el suelo estaba seco tras la sequía de julio y había un fuerte viento que cambiaba de dirección.

En los próximos días las previsiones meteorológicas pronostican una nueva ola de calor, a lo que hay que sumar las precedentes altas temperaturas que han acarreado la sequía actual. La situación de alarma ha llevado a la Prefectura a establecer restricciones de agua en 95 localidades de Ipar Euskal Herria, entre las que se encuentran tanto Angelu como todas las circundantes.

Los bomberos se ocupan de vigilar los alrededores junto con la brigada forestal que recorre diariamente los dos bosques para informar del riesgo a los habitantes. La policía municipal efectúa rondas regulares para asegurar el respeto de la nueva medida.

Incendio del 2020

Durante el incendio del 2020 se quemaron 165 hectáreas: 100 de pinar y 65 de árboles y jardines; 25 personas fueron atendidas por los servicios de urgencia; 24 viviendas sufrieron desperfectos o quedaron totalmente destruidas; y 100 personas fueron evacuadas.

Las instituciones dueñas y gestoras del terreno subrayaron que se evitó una catástrofe mayor gracias a la rápida respuesta. En total se movilizaron 208 bomberos, 50 máquinas móviles, dos aviones contra incendios que lanzaron agua 36 veces (6 toneladas cada vez), 120 agentes municipales y 60 policías.

Se trató de un incendio provocado; un menor con antecedentes penales fue detenido tras jactarse de su acción ante sus amigos.