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Gasteiz trasladará el mosaico ‘Números primos’ de Esther Ferrer al Artium

La obra de suelo ‘Números primos’, de la artista Esther Ferrer (Donostia, 1937), ubicada hasta ahora en el Parque del Prado de Gasteiz, será trasladada a la plaza interna del Museo Artium de la capital alavesa.

Visualización de Artium de la obra ‘Números primos’, expuesta ya en su exterior.
Visualización de Artium de la obra ‘Números primos’, expuesta ya en su exterior. (ARTIUM)

La obra de la artista donostiarra Esther Ferrer ‘Números primos’ será trasladada a la plaza interna del Museo Artium. Se trata de un mosaico de suelo de grandes dimensiones, integrada por más de 10.000 piezas de cerámica, en la que Ferrer trabaja con la seriación de números primos, uno de los temas fundamentales en su producción.

En realidad, no será reubicada, sino construida de nuevo en la plaza del Artium, con cerámicas un poco más pequeñas que la original, dado que el espacio en el museo es más limitado. Todavía no se ha decidido qué se hará con la pieza actual tras ser desmontada.

Actualmente se fabrican ya las piezas de cerámica, de manera que se espera que el montaje nuevo en el Artium esté listo para antes del verano. Todo el traslado cuenta con el apoyo y la participación activa de la artista vasca, que ha estado en la presentación este miércoles en el museo vitoriano.

La instalación de ‘Números primos’ en el parque del Prado se remonta al año 2003. Fue concebida de manera específica para Gasteiz y consta de 10.000 losas cuadradas de cerámica de gres, con 3 tipos de piezas: 4.410 piezas con una diagonal roja, 4.410 piezas con una diagonal azul y el resto con un número primo impreso, del 41 al 10.039, ambos incluidos.

La espiral de Ulam

La obra tiene su origen en el interés de Esther Ferrer en las matemáticas y en concreto en una forma de representación gráfica llamada la espiral de Ulam, descrita por el matemático polaco Stanislaw Ulam.

Ferrer ha explicado que Ulam descubrió que «si se escriben los números primos desde el uno en una espiral se formaban muchas diagonales pequeñas; si empiezas desde el 41 se forma una diagonal continua que al final se interrumpe».

Su interés por los números primos surgió de un sueño: «Un día soñé que nadaba en un mar de números azules. Cuando desperté, pensé que eran impares, el 11, el 19, y luego me di cuenta de que eran primos. No sabía nada de ellos, me documenté y decidí integrar los números primos en el arte».

«Los números primos tienen relación con el universo, aunque los matemáticos y los astrónomos digan que no, yo digo que sí -se ha reído la artista-. Como las galaxias, cada vez se alejan más unas de otras, y entre ellos hay vacíos cada vez mayores», ha subrayado.

Han transcurrido casi dos décadas desde la producción e instalación de esta obra en el Parque del Prado. Desde esa fecha, ‘Números primos’ ha sufrido un importante deterioro debido a la fragilidad propia de los materiales y a su emplazamiento en un espacio público.

Su nueva ubicación en el Artium permitirá una mejor conservación, además de poner en valor el trabajo de la artista donostiarra, al ponerse en contexto con obras de su tiempo. El traslado costará sesenta mil euros, de los que la artista ha resaltado que ella no verá «un céntimo».

Además, Esther Ferrer será la primera artista mujer en formar parte del itinerario de esculturas expuestas en el espacio público que ocupa el museo, en el que ya figuran obras de Jorge Oteiza, Nestor Basterretxea, Eduardo Chillida, Vicente Larrea y Richard Serra.

Ferrer ha resaltado que en la plaza del museo ‘Números primos’ seguirá funcionando como espacio de juego, pero al tener gradas al lado la gente podrá conversar y se podrán hacer performance sobre ella.

En su trayectoria, Ferrer ha tenido una destacada vinculación con Gasteiz: En 2011, Artium organizó la exposición ‘Esther Ferrer. En cuatro movimientos’, en cuyo marco desarrolló varias performances.

En la actualidad, la artista está representada en la colección del Artium con piezas como ‘Autorretrato en el tiempo’ (1981-1994) y ‘Sin título’ (2011) y la exposición ‘Zeru bat, hamaika bide’ muestra una de sus obras más significativas, el vídeo ‘Acciones corporales’, fechado en 1975.