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La Fiscalía francesa investiga el caso de un joven en coma tras las protestas de Sainte-Soline

La Fiscalía francesa está investigando el caso de un hombre gravemente herido en una manifestación ecologista contra un proyecto de embalses destinados a la agroindustria, después que su familia presentara una denuncia.

Manifestantes rodeados de gas lacrimógeno durante las protestas en Sainte-Soline.
Manifestantes rodeados de gas lacrimógeno durante las protestas en Sainte-Soline. (Thibaud MORITZ | AFP)

El padre y la madre del joven de 32 años, natural de Toulouse (Occitania) y que se encuentra en coma, presentaron una denuncia por «intento de asesinato» y por impedirse el acceso a los servicios de emergencia. Participó el sábado junto a miles de personas más en una protesta ecologista contra un embalse agrícola en Sainte-Soline (centro-oeste del Estado francés), que estuvo marcada por las imágenes de batalla campal con las fuerzas de seguridad.

Unas 200 personas resultaron heridas, entre ellas 40 de gravedad, según los organizadores. Las autoridades informaron de 47 gendarmes heridos. Dos de los manifestantes heridos siguen en coma.

Los organizadores de la manifestación ecologista dijeron el martes que el hombre resultó herido de gravedad al ser alcanzado en la cabeza por una granada de gas lacrimógeno disparada por los agentes.

«Sus allegados están decididos a testimoniar y revelar la verdad de lo ocurrido», añadieron.

La investigación, abierta inicialmente por la Fiscalía local de Niort, se ha trasladado al Ministerio Público de Rennes (oeste), que tiene competencia en casos que involucran a gendarmes, un cuerpo militarizado.

La polémica sobre la actuación de las fuerzas de seguridad en Sainte-Soline, así como en las protestas contra la reforma de las pensiones del presidente Emmanuel Macron, se ha recrucedido.

Varios observadores, como la Liga de Derechos Humanos (LDH), presente en el lugar de los hechos, aseguran que los agentes hicieron un uso indiscriminado de la fuerza e impidieron el acceso de los servicios de emergencias, sobre todo en un caso de urgencia vital.

Desde el sábado, las autoridades aseguran que el retraso en la llegada de los equipos de socorro se debió a que primero debían garantizar su seguridad sobre el terreno.

La única respuesta por el momento del ministro francés de Interior, Gérald Darmanin, fue anunciar el inicio de un procedimiento de disolución de unas de las organizaciones detrás de la protesta: Soulèvements de la terre.