
Al poco de fallecer el Padre Gabriele Amorth hace siete años, William Friedkin, que era el director de su película favorita ‘El exorcista’ (1973), le dedicó a título póstumo el documental ‘The Devil and the Father Amorth’ (2017). Ahora llega la correspondiente ficción basada en los libros de memorias escritos por este religioso de Modena, como el vinagre, que vivió más de noventa años luchando contra el Maligno.
La película, no es que repita la conocida iconografía de las películas de exorcismos, sino que en realidad fue el Padre Amorth quien la divulgó, así que los vómitos, las levitaciones o los mensajes con voz distorsionada dichos en lenguas muertas forman parte del que, según él, era su modus operandi habitual.
Aunque fue reconocido oficialmente como exorcista del Vaticano en 1986, mantuvo un contencioso con la Iglesia de Roma cuando Juan Pablo II hizo una revisión del ‘Rituale Romanum’ en 1999, limitando las prácticas exorcistas. Por ello, la película tiene también un aire conspiranoico como ‘El Código Da Vinci’ (2006), sobre secretos diabólicos.
Localizada la joven de 23 años desaparecida desde el día 25 en Donostia

El primer festival Aske pone la banda sonora a una Euskal Herria libre

La Ertzaintza deja impune la desaparición del test de drogas del hijo de un jefe policial

Mueren tres esquiadores, uno vasco, por un alud junto a los ibones de Brazato (Panticosa)

