Koldo Landaluze
Especialista en cine y series de televisión

Crónica de un triángulo sentimental

PASSAGES
Estado francés, 2023. 91'. Dir.:
Ira Sachs. Guion: Ira Sachs, Mauricio Zacharias. Prod.: Ali Betil, Kevin Chneiweiss, Hannah Janal, Kateryna Merkt. Int.: Franz Rogowski, Ben Whishaw, Adèle Exarchopoulos, Erwan Kepoa Falé, Arcadi Radeff, Léa Boublil. Mont.: Sophie Reine. 

Fotograma de ‘Passages’.
Fotograma de ‘Passages’. (NAIZ)

La nueva película de Ira Sachs se revela como un estudio íntimo, sincero e incisivo de la naturaleza del ser humano y de las complejidades del amor y las relaciones. Ambientada en París, ‘Passages’ cuenta el cambio de dinámica que se produce en un triángulo amoroso desbordado por el amor, el deseo y el anhelo de lo inalcanzable.

En su octavo largometraje, el director estadounidense tuvo como referentes dos de sus películas favoritas relacionadas con los triángulos sentimentales: ‘Loulou’ de Maurice Pialat (1980) y ‘El inocente’ (1976), la última película de Luchino Visconti. Sachs también plantea en el filme un retorno a sus primeros trabajos, tanto a ‘El delta’ (1996) como a ‘Forty Shades of Blues’ (2005), en los que abordó dicha temática.

Batalla de deseos

Según explicó el propio director, «el drama de ‘El inocente’ me fascina. Lo provoca la naturaleza de los tres personajes, cada uno de los cuales desea al otro hasta llegar a un punto en el que pierde el interés. Es una batalla de deseos, y es esa estructura la que nos interesó para nuestra historia». El director y su habitual guionista, Mauricio Zacharias, decidieron construir su triángulo en torno a una pareja gay cuya confortable vida se ve alterada cuando uno de ellos se enamora de una mujer.

Según nos descubre su argumento, durante el último día del rodaje de su película, el director Tomas (Franz Rogowski) inicia de forma impulsiva una apasionada historia de amor con Agathe (Adèle Exarchopoulos), una joven maestra. Para Tomas, estar con una mujer es una novedad excitante que está deseando explorar a pesar de que está casado con Martin (Ben Whishaw). Pero cuando Martin inicia su propia aventura, Tomas, muy voluble, vuelve a centrar su atención en su marido.

A través del personaje del director de cine, Sachs buscó explorar las emociones y el comportamiento que provoca el deseo. Como dice él mismo: «¿Qué se siente cuando sientes pasión por algo que no tienes muchas posibilidades de conseguir? ¿Qué consecuencias tiene en tu propia vida? Para Tomas, llegar a conseguirlo se convierte en una obsesión. Después, cuando lo tiene, se da cuenta de que quiere algo más. Y que ese algo más sigue cambiando. Hay un vacío que nunca se llena. Creo que eso es algo muy humano y dramático».