El Ayuntamiento de Irun y la Asociación de la Casa de las Mujeres de Irun (ACMI) han rendido este lunes un homenaje a Nagore Laffage, la joven irundarra a la que José Diego Yllanes mató en los sanfermines de 2008, para dejar claro que, 16 años después, «su recuerdo sigue grabado en la memoria y en los corazones de todas y todos».

El acto ha dado comienzo con un recibimiento en el exterior de la Casa de las Mujeres, con el Coro de Mujeres del taller de canto de la Escuela de Empoderamiento que ha interpretado ‘Canción sin miedo’, de Vivir Quintana, una pieza que se ha convertido en un himno internacional en la lucha feminista contra el feminicidio.

A continuación, se ha ofrecido una danza homenaje en el interior de la Casa con la bailarina Marina Esquisabel, a la que han seguido unas palabras de acogida por parte de dos representantes de la Casa de las Mujeres a Asun Casasola, madre de Nagore, más la entrega de un ramo de flores.

Con este acto, el Ayuntamiento de Irun y la ACMI han querido recordar a Laffage, además de dejar claro que las violencias contra las mujeres dejan heridas irreparables. Así, también han querido reconocer y alentar la labor que Asun Casasola está llevando a cabo para ayudar en la prevención de las violencias machistas.

También hubo en Iruñea

La pasada semana Iruñea también brindó un sentido homenaje a Laffage, haciéndolo extensivo a quienes cada mes denuncian en Nafarroa ser víctimas de violencia sexual o a las fallecidas a manos de sus parejas o exparejas.

Junto a miembros de grupos feministas, peñas y otras asociaciones ciudadanas, al acto asistieron también representantes del Gobierno de Nafarroa con su vicepresidente Félix Taberna y la consejera de Interior, Amparo López, al frente, así como el presidente del Parlamento foral, Unai Hualde, y del Ayuntamiento de Iruñea, con el alcalde, Joseba Asiron, a la cabeza. Acudieron miembros de todos los partidos con representación en el Parlamento, excepto Vox.