Imanol  Intziarte
Redactor de actualidad, con experiencia en información deportiva y especializado en rugby

«Los parkings disuasorios han evitado la entrada de 22.040 vehículos al centro de Donostia»

El Ayuntamiento presenta un balance positivo de las medidas de movilidad que se adoptaron a principios del verano y que, en palabras de la concejala Olatz Yarza, «han contribuido a una mejora del flujo del tráfico estival y una menor contaminación ambiental y acústica en la ciudad».

Dbus ha registrado cifras de viajes récord este verano.
Dbus ha registrado cifras de viajes récord este verano. (Gorka RUBIO | FOKU)

Aunque aún no ha terminado el mes de agosto, la concejala de Movilidad y Transporte Sostenible de Donostia, Olatz Yarza, ha hecho este viernes balance de las medidas adoptadas al principio del verano para mejorar un aspecto que durante los últimos años viene generando importantes quebraderos de cabeza.

Yarza ha destacado que la ciudad se encuentra inmersa en «un cambio de paradigma» y que uno de los objetivos de los cambios era «proteger y favorecer el buen funcionamiento del transporte público». En ese sentido, las cifras de Dbus apuntan a «récords históricos», por ejemplo, con un incremento del 12,5% de los viajes en julio, respecto al mismo mes del año pasado, y con un índice de puntualidad del 96%, según sus datos.  

En cuanto al sistema de alquiler de bicicletas públicas Dbizi, se han registrado 365.699 viajes registrados entre junio, julio y lo que va de agosto, frente a los 244.200 viajes del mismo periodo de 2023 y los  226.141 de 2022.

Yarza también ha ofrecido un balance positivo la adecuación de parkings disuasorios en Illunbe, Igara y Universidades. «Gracias a la adecuación de estos tres aparcamientos hemos evitado que un total de 22.040 vehículos hayan accedido al centro de la ciudad entre el 15 de julio y el 25 de agosto», ha asegurado.

En cuanto al servicio de autobús lanzadera de Illunbe, este verano ha sido de pago y su uso se ha reducido en alrededor de un 40%, pero la concejala ha subrayado que «el precio de una línea eminentemente para visitantes no tiene por qué recaer en las y los donostiarras».

Solo cuatro cierres

A su juicio, estas medidas «han contribuido a una mejora del flujo del tráfico estival y una menor contaminación ambiental y acústica en la ciudad». Prueba de ello es que el protocolo para cerrar los accesos en momentos de tráfico intenso solo se ha activado en 4 ocasiones, frente a las 21 del año anterior, a pesar de que la entrada de vehículos a la ciudad ha aumentado un 2,59% en julio y un 3,73% en agosto.

Otro de los asuntos que genera polémicas es la masiva presencia de autocaravanas y su uso del aparcamiento y del espacio público. Donostia cuenta con 89 plazas estacionamiento específico para este tipo de vehículos –Berio e Illunbe–, además de las existentes en los campings de Igara e Igeldo, pero resulta evidente que son insuficientes.

Entre el 1 de julio y el 21 de agosto se han interpuesto 331 denuncias por estacionar obstaculizando el paso de peatones o la circulación, o estacionar en zona reservada a residentes sin autorización, además de otras se han 69 en las zonas del litoral especialmente reguladas –zona del Tenis, Paseo Nuevo y Sagües– para vehículos de más de 5 metros.