Eusko Ikaskuntzan tiene la intención de elaborar un plan para fomentar la diversidad y la convivencia, a fin de apoyar a las instituciones ante estos desafíos futuros. En la segunda jornada de su congreso, ha destacado la necesidad de prepararse para la transición social ante los rápidos cambios que se avecinan, preservando la diversidad cultural e identitaria vasca.

Su presidenta, Ana Urkiza, ha explicado que «la sociedad vasca tiene una serie de retos que abordar de cara a futuro, retos que ya estamos percibiendo y que, con los cambios tan acelerados que se avecinan, sin duda tendremos que abordar próximamente. Ese es precisamente uno de los objetivos más importantes del congreso».

Patxi Juaristi, presidente del encuentro que se desarrolla en el Palacio Europa de Gasteiz, ha coincidido en que «tenemos que prepararnos para estas transiciones sociales, y este congreso es un gran punto de partida y de encuentro en ese sentido».

El lema del Congreso, ‘Elkartzen Gaituena – Lo que nos une – Ce qui nous rassemble’, tiene como objetivo que los cientos de personas y expertas reunidos en la capital alavesa reflexionen sobre estos desafíos, «porque tenemos –ha expuesto Juaristi– que despertar la conciencia comunitaria en la sociedad vasca, para así afrontar en común tanto el futuro como sus retos».

Este jueves se han presentado las conclusiones y propuestas de cuatro proyectos. A modo de resumen, Urkiza ha señalado que «las conclusiones ponen de manifiesto que la cohesión social y la participación de la comunidad son imprescindibles para afrontar los retos del futuro. Tenemos que desarrollar la identidad, la cultura, la educación y la innovación social vascos en un marco de transición ecológica, digital y social, y sobre la base de la dignidad, la inclusión y la diversidad».

Juaristi ha añadido que «hay que impulsar la participación y la cooperación de la comunidad a diferentes niveles, porque la gobernanza abierta y las iniciativas que promueven la innovación social demuestran su potencial para construir un mejor futuro».

La identidad

Así, el primer proyecto, ‘La(s) identidad(es) vasca(s) en el siglo XXI: objetivo 2050’, ha girado precisamente en torno a la identidad. Además de explicar el mismo, las personas coordinadoras del grupo de trabajo han dado a conocer los puntos analizados, el diagnóstico y los resultados y, a modo de conclusión, han incidido en que se debe entender la identidad vasca como diversa y enriquecedora, impulsando la unión y la cohesión entre los diferentes territorios.

«La inclusión y la participación son fundamentales para integrar a la población inmigrante y a las personas que están en la periferia de la sociedad. Para conseguir una identidad vasca fuerte y cohesionada es necesaria la implicación de toda la comunidad», han indicado.

Posteriormente, se ha presentado ‘El Sistema Educativo Vasco. Trabajando el futuro en común’. En este segundo proyecto se ha destacado la importancia de crear un espacio educativo unificado en el que el euskara y la cultura vasca sean elementos comunes. «Hay que fomentar las redes de trabajo colaborativo, la movilidad y la inclusión para impulsar la cohesión interterritorial», ha afirmado Nora Salbotx, miembro del proyecto.

Reflexión creativa con Kukai

A continuación, ha llegado el turno de la reflexión creativa impulsada por Kukai Dantza Taldea. Esta actividad pionera e innovadora ha unido a un sinfín de artistas de gran diversidad de toda Euskal Herria. Además, en esta llamativa actividad han trabajado junto con las personas asistentes al congreso.

«Queríamos ir más allá de un espectáculo tradicional, una actividad que formara parte del congreso y que encajara en sus objetivos», ha explicado Jon Maya. En este sentido, Kukai Dantza Taldea ha reflejado la variedad musical de Euskal Herria y ha llevado a cabo esta actividad artística de participación directa, con un claro objetivo: «Transmitir ideas y servir de cauce para la reflexión».

Tras la pausa del mediodía, se ha procedido a la exposición de ‘GizarteLAB: Laboratorio de Experimentación para la Innovación Social’, donde se ha demostrado que la innovación social y la gobernanza abierta son modelos eficaces, además de evidenciar la importancia de la participación ciudadana frente a las transiciones digitales, ecológicas y demográficas.

«La experimentación y la colaboración ciudadana y política son necesarias para crear nuevos modelos y fortalecer las comunidades», ha señalado Auxkin Galarraga, director científico del proyecto.

Por último, se ha presentado ‘Derechos culturales: participación y políticas de gobernanza’. Como en los proyectos anteriores, se ha expuesto el marco teórico-metodológico del proyecto, así como el diagnóstico y las propuestas correspondientes.

En cuanto a las conclusiones, la portavoz del proyecto Oskia Ugarte ha destacado que, en el ámbito de la cultura, son «fundamentales» la participación y la gobernanza inclusiva. «Hay que mejorar las condiciones de la cultura vasca, al objeto de crear ecosistemas culturales participativos y diversos, donde las comunidades, las personas creadoras e instituciones colaboren», ha explicado.

A fin de completar la jornada congresual, se han abordado las conclusiones de los grandes ejes y las líneas de futuro, recalcando que estos cuatro proyectos han demostrado que «la inclusividad, la participación, la diversidad y la cooperación son claves» para construir el futuro de la sociedad vasca.

Por ello, la intención de Eusko Ikaskuntza de elaborar un plan para fomentar la diversidad y la convivencia, apoyando, como de costumbre, a las instituciones mediante la intermediación directa.