El presidente francés, Emmanuel Macron, ha anunciado que Europa debe potenciar su defensa ante el aumento de «la amenaza de Rusia» y las dudas sobre el compromiso de Estados Unidos con la seguridad del continente.

En una intervención televisada a la nación, ha anunciado además que ha abierto «el debate estratégico» para extender a los aliados europeos del Estado francés la disuasión que ofrece el arsenal nuclear de su país, aunque ha recalcado que la decisión final sobre el uso de armas atómicas «estará siempre» en manos francesas.

Rusia «es una amenaza para Francia y para Europa», ha afirmado Macron, quien ha enumerado las crecientes «agresiones» de Moscú a países europeos en los últimos años, entre las que ha citado ejecuciones de opositores exiliados, interferencia en elecciones, ciberataques, campañas de desinformación o «provocaciones» de aviones y buques militares rusos junto a las fronteras europeas.

«EEUU ha cambiado de posición»

Sobre Estados Unidos, «nuestro aliado», el presidente francés ha dicho que «ha cambiado de posición en la guerra. Apoya menos a Ucrania y deja planear las dudas sobre el futuro», ha dicho Macron, para recalcar acto seguido que «la paz no puede ser la capitulación de Ucrania».

Por ello, ha defendido que Europa debe «continuar ayudando a los ucranianos a resistir hasta que puedan negociar con Rusia una paz sólida».

También ha anunciado que la próxima semana se celebrará en París una reunión de los jefes de Estado Mayor de los países dispuestos a garantizar un eventual acuerdo de paz en Ucrania.

El objetivo es elaborar «un plan para una paz sólida, duradera y verificable» construido junto con Kieve y «varios socios europeos».

Espera que Estados Unidos apoye esta iniciativa. «pero tenemos que estar preparados si ese no es el caso», ha indicado, agregando que la paz «no puede construirse a cualquier precio» y bajo los deseos de Moscú, puesto que ello implicaría una «capitulación» por parte de Ucrania.

Macron ha alertado de que Rusia está en un programa de rearme para aumentar aún más sus fuerzas armadas, con 300.000 soldados, 3.000 carros de combate y 300 cazas adicionales para 2030: «¿Quién puede creer que Rusia se conformará con Ucrania?», ha preguntado.

Frente a ello, ha admitido que hay dudas sobre el compromiso de Washington con la seguridad europea y, aunque ha mostrado su deseo de que Estados Unidos siga implicado, ha advertido de que «hay que prepararse por si no fuera el caso».

Para el mandatario galo, la salida que le queda a Europa es un refuerzo de sus capacidades de defensa, dentro de un proceso del que el Consejo Europeo extraordinario de este jueves en Bruselas será un primer paso, porque es necesario «reforzar nuestra independencia en materia de defensa y seguridad».

«El futuro de Europa no puede ser decidido en Washington o Moscú. La amenaza viene del este, la situación de estabilidad posterior a la caída del Muro (de Berlín) ya no existe», ha resumido.

Disuasión nuclear

El presidente francés ha tocado también un tabú a nivel doméstico, al anunciar que ha abierto el debate sobre extender a los aliados europeos del Estado francés la disuasión nuclear que le permiten sus armas atómicas, y que le convierten en el único miembro de la Unión Europea con esta capacidad.

«Nuestra disuasión nuclear nos protege, es francesa de principio a fin (...) He abierto el debate estratégico de la protección con la disuasión nuclear de nuestros aliados. La decisión última de su utilización estará siempre en manos del presidente de la República», ha afirmado Macron.

A nivel interno, Macron ha anunciado la continuación del incremento del gasto militar aunque «sin aumentar los impuestos», y ha lanzado un llamamiento a favor de la unidad y el compromiso de los franceses: «La patria os necesita».