El sindicato LAB ha anunciado que no acudirá el viernes a la reunión por el Pacto de Salud de Lakua y que no va a firmar el mismo. Argumenta que «no ha habido ninguna posibilidad para abordar el cambio profundo de políticas que requiere Osakidetza». ELA se quedó fuera desde el principio.

Según ha explicado LAB en una rueda de prensa este jueves, para transformar y fortalecer Osakidetza, «hay que dejar de lado las políticas privatizadoras llevadas a cabo hasta ahora, y la dependencia del sector privado debe ser excepcional, justificada y temporal». Añaden que no han quedado asegurados los compromisos firmes que consideran necesarios para apostar por el sistema público de salud.

Para este sindicato, «dos modelos antagónicos han estado enfrentados en la mesa». Por un lado, quienes han apostado por reforzar lo público y, por otro, quienes «anteponen» el negocio privado a mejorar lo público como PNV, PSE y Confebask.

Entre los que pretenden reforzar lo público ha estado EH Bildu, que presentó una enmienda sobre colaboración público-privada del Pacto de Salud. El consejero Alberto Martínez ha anunciado este jueves, víspera del día en el que quiere cerrar el pacto, que la enmienda ha sido rechazada.

El portavoz de EH Bildu en el Parlamento de Gasteiz, Pello Otxandiano, declaró el martes que su enmienda era «el suelo» para un acuerdo y «absolutamente aceptable» por todos los participantes de la Mesa.

A pesar de eso, Martínez ha comunicado su «absoluta convicción» de que la coalición soberanista no se desmarcará del pacto. Según él, se han presentado más de cien enmiendas y que tras ser analizadas por el grupo de expertos «precisamente» las de EH Bildu no están entre las aceptadas por los 28 agentes que componen la Mesa.

Martínez explicó que en los 24 puntos a debatir se ha llegado a acuerdos ya sea por unanimidad o por «consenso» y precisó que en el caso de la colaboración pública-privada se recoge el objetivo de no superar el actual porcentaje de concertación.

Por su parte, la parlamentaria de la coalición Nerea Kortajarena ha declarado este jueves que EH Bildu desconoce cuál es el posicionamiento de los agentes que participan en el foro en torno a su enmienda y tampoco la posición del PNV y del PSE y ha defendido que el tema de las privatizaciones se merece ser discutido en el seno de este foro.

Ha recordado que hace un año todos los partidos, durante y después de la campaña electoral, se comprometieron a blindar Osakidetza y ahora «parece ser que se quiere dar la espalda a ese mandato».

«Consenso» para cerrar el viernes

Aún así, el consejero de Lakua ha reiterado este jueves su «optimismo» sobre un pacto de salud «con un amplio consenso», y ha apelado al «compromiso» de todos los agentes que participan en este proceso para cerrar un acuerdo este próximo viernes.

Martínez, en declaraciones a los medios de comunicación a su llegada al Parlamento de Gasteiz, ha explicado que «el pacto es consenso; ha sido consenso en el diagnóstico, ha sido consenso también en los criterios y valores, y ha sido consenso también en los 24 grupos de trabajo, [cuyos documentos] han sido aprobados por unanimidad en unos casos y por amplia mayoría en otros», ha afirmado.

En todo caso, ha reconocido que «cada uno de los agentes tendrá que valorar si en la relación final se siente cómodo con ella y tendrá que tomar una posición». «Mañana es un día en el que todos deberíamos tener un nivel de compromiso, porque no es una cuestión de más tiempo, es una cuestión de más compromiso sobre intentar buscar soluciones», ha advertido.

Respecto a las advertencias de Sumar de que no entrará en un pacto que «normalice» la participación de empresas privadas en la sanidad pública, ha afirmado que la coalición progresista «tiene una responsabilidad añadida», dado que lidera el Ministerio español de Sanidad. «Nos tendrán que explicar en qué no están de acuerdo, en qué aspectos de ese consenso no están de acuerdo», ha añadido.