Imanol  Intziarte
Redactor de actualidad, con experiencia en información deportiva y especializado en rugby

Zubimendi «gunner»: Zubieta, factoría de mediocentros para lo más selecto del continente

Ya es oficial. Martín Zubimendi deja la Real rumbo al Arsenal londinense. En el último cuarto de siglo es el tercer mediocentro canterano que firma por un club europeo de primera línea. La Real hace caja y la factoría no para, Gorrotxa y Urko aguardan su oportunidad. Que pase el siguiente.

Zubimendi recibe el abrazo de Imanol en el último partido de la temporada en Anoeta.
Zubimendi recibe el abrazo de Imanol en el último partido de la temporada en Anoeta. (Jon URBE | FOKU)

La marcha de Zubimendi al Arsenal por más de 60 millones de euros –se habla de entre 66 y 70– certifica nuevamente la capacidad de la Real Sociedad para generar en Zubieta mediocentros de talla mundial. No puede ser casualidad que en un cuarto de siglo la factoría blanquiazul haya dado tres diamantes como Xabi Alonso, Asier Illarramendi y el propio Zubimendi, fichados por clubes punteros como Liverpool, Real Madrid y los ‘gunners’.

Cabe destacar además que no se trata de que el club haya peinado el ancho mundo a la caza y captura de las perlas más prometedoras en edad alevín o infantil, sino que son estrellas surgidas en un radio de unos 50 kilómetros, criadas respectivamente en Tolosa, Mutriku y Donostia.

En estos 25 años, acudir al mercado ha sido la excepción, con el caso más llamativo del manchego Diego Rivas, que llegó en 2006 procedente del Getafe, previo pago íntegro de una cláusula de rescisión de tres millones de euros. El resto, producto genuino ‘made in Zubieta’.  

Un año extra

Lo de Zubimendi es la crónica de un adiós anunciado. El de Ulia ya rechazó hace doce meses la oferta del Liverpool, que posteriormente ha sido campeón de la Premier. Un título que podía tener en su palmarés, pero ese verano se fueron Le Normand al Atlético de Madrid y Merino al Arsenal, se auguraba un año complicado para la Real, y optó por quedarse una temporada más.

Ahora se va tras irrumpir en la recta final de la 2019-20 y ser indiscutible durante cinco temporadas completas, en las que ha jugado más de cuarenta partidos por curso, hasta un total de 236. Con 26 años y la vitola de titular con la selección española –aunque habrá que ver qué sucede con el regreso de Rodri– hace las maletas en pos de una segura ganancia económica y una probable mejora deportiva.

El equipo de exrealistas como el técnico Mikel Arteta, Martin Odegaard o el mencionado Merino lleva tres años seguidos terminando la Premier en segunda posición, y busca un título grande que dé brillo a su proyecto.

Lo emocional y lo profesional

No por conocida su marcha, deja de ser dolorosa. El aficionado y el profesional se mueven en parámetros diferentes. El primero antepone siempre al club de sus amores y reclama al segundo lo mismo, especialmente si es ‘de la casa’ –tampoco olvidemos que además cobran sus buenos dineros–, por mucho que este fervor no siempre vaya a ser recíproco. 

Porque se considera lógico que el club le enseñe la puerta de salida a un jugador cuando entiende que este ya no da el nivel requerido, independientemente de sus deseos y de su fidelidad anterior. Está el firmamento lleno de aspirantes a ‘one club man’ que tuvieron que marcharse fuera en la recta final de su trayectoria. Así es la élite.

El profesional –y sino ya se lo dirá su agente–, es consciente de esto, y trata de exprimir al máximo sus años de carrera, sabedor de que una lesión o un bajón de juego pueden desviar los focos hacia otro lado de un día para otro.

Dos aspirantes de casa

En lo deportivo, a priori la Real vuelve a mirar a Zubieta. No hay tres sin cuatro, e incluso sin cinco, porque por ahora se otea un dúo de posibles herederos. Uno nacido en ese radio de 50 kilómetros, el eibartarra Jon Gorrotxategi, que aún no ha debutado en Primera pero que ha sido objeto de numerosos elogios tras una campaña en la que ha estado cedido en el Mirandés, revelación de Segunda que se ha quedado a un paso del ascenso.

El otro nombre propio es el del gasteiztarra Urko González de Zarate, llegado muy joven a la disciplina blanquiazul y que ante la falta de minutos fue cedido el pasado invierno al Espanyol, donde enseguida se hizo con el puesto, siendo uno de los pilares para la sufrida permanencia de los periquitos en la máxima categoría.

En los últimos días, periodistas referentes en el mundillo de los fichajes han sacado a la palestra el nombre del argentino Ezequiel ‘Equi’ Fernández, centrocampista argentino que militaba en Boca Juniors y que hace doce meses fue fichado por el Al Qadsiah de Arabia Saudí por casi 20 millones. Cumplirá 23 años a finales de este mes. Primero habrá que ver si viene, y luego para qué posición.

La decisión final está en manos de Erik Bretos y Sergio Francisco. Este lunes se dará el banderazo de salida a la pretemporada, una especie de ‘juegos del hambre’ a los que muchos están llamados, pero no todos quedarán entre los elegidos.