El secretario general de la ONU, António Guterres, ha recordado hoy que la consecución de un Estado palestino «es un derecho, no una recompensa», y advirtió de que «negar (a los palestinos) ese Estado sería un regalo a los extremistas».

Guterres ha hecho estas afirmaciones en su discurso introductorio a la Conferencia internacional para la solución de los dos Estados (Israel y Palestina), organizada por el Estado francés y Arabia Saudí y en la que se espera que varios países den el paso de reconocer al Estado palestino.

Uno de los más destacados ha sido el Estado francés, cuyo presidente, Emmanuel Macron, ha anunciado el reconocimiento del Estado palestino en la apertura de dicha conferencia, lo que ha generado el aplauso generalizado de los presentes en la sala.

Macron ha adelantado que este mismo lunes reconocerán también el Estado palestino Andorra, Australia, Bélgica, Luxemburgo, Malta, Mónaco, y San Marino.

El mandatario francés ha asegurado que «este reconocimiento es la única solución que traerá la paz a Israel» a pesar e su «su reticencia y su miedo».

Además de evitar medidas de presión efectivas para parar el genocidio, Macron ha insistido en que sigue siendo un aliado de Israel, señalando que «Francia nunca ha fallado a Israel cuando su seguridad estaba en juego, incluso ante los ataques iraníes» antes de recordar la «herida aún abierta» del ataque del 7 de octubre de 2023.

El presidente francés ha insistido en la idea de que el reconocimiento de Palestina tiene como objetivo el aislamiento de buena parte de la resistencia palestina. El domingo afirmó que «si queremos aislar a Hamas, el proceso de reconocimiento y el plan de paz que lo acompaña son una condición previa», y este lunes ha insistido en la necesidad de «neutralizar políticamente» al movimiento palestino.

Además, Macron ha condicionado la apertura de una embajada en Palestina a la «liberación de los rehenes» y a que se alcance un acuerdo de alto el fuego.

Guterres ha querido dirigirse a los que aún se oponen a esa solución –con Estados Unidos a la cabeza–, a los que ha preguntado: «¿Cuál es la alternativa? ¿Un escenario de un solo Estado en el que se niega a los palestinos los derechos básicos? ¿Expulsados de sus casas y su tierra? ¿Forzados a vivir por siempre bajo ocupación, discriminación y sojuzgamiento?».

«¿Cómo es eso posible en el siglo XXI? ¿Es acaso aceptable?», ha exclamado el secretario general de la ONU, que ha expresado que, si no se llega a una solución de dos Estados, «no habrá paz en Oriente Medio y el radicalismo se expandirá por el mundo entero», ha remachado.

Hasta el momento, 151 países de los 193 con asiento en la ONU (77% del total) reconocen el Estado palestino, entre ellos la práctica totalidad de África, Latinoamérica y buena parte de Europa.

«Teatro», para Israel

El embajador israelí ante la ONU, Danny Danon, ha tildado de «teatro» la conferencia internacional y ha asegurado que «no cambiará las vidas de los palestinos sobre el terreno». «Veremos un espectáculo cuando el presidente (Emmanuel) Macron y sus amigos se reúnan. Sabemos que esta conferencia surge de intereses nacionales, no es diplomacia (...) Es una victoria vacía, un discurso vacío, en lugar de condenar realmente el terrorismo», ha espetado.

En línea con las afirmaciones del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, el embajador del Estado hebreo ha asegurado que habrá «consecuencias» tras estas declaraciones unilaterales y, en concreto, respecto al presidente francés, aseguró sentirse «decepcionado».

«Es muy fácil venir aquí, hacerse unas fotos y dar un discurso, pero esto no cambiará nada», ha recalcado Danon, quien ha indicado que está «coordinando esfuerzos con Estados Unidos» para «traer de vuelta a los rehenes y acabar con Hamás».

Al ser preguntado por la situación en Cisjordania y si Israel se encamina a una «anexión» total del Territorio Ocupado, el embajador ha rechazado el uso de esta palabra y ha preferido catalogarlo como «aplicación de soberanía». «Cuando algo te pertenece, no lo anexionas. Creo que es una decisión que el Gobierno tendrá que debatir», ha añadido.

Estados Unidos ha tratado a su modo de sabotear esta conferencia al denegar el visado de entrada en el país al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, y su equipo, en una clara contravención de los tratados que vinculan a Estados Unidos como país anfitrión y a la ONU.