Patricia Martínez Sastre (Efe)
Rihiya (Cisjordania)

Soldados israelíes matan a niños palestinos con impunidad: uno cada semana en Cisjordania

El inicio hace más de dos años de la ofensiva contra Gaza, donde se ha centrado la atención del mundo, sirvió a Israel para desencadenar una espiral de violencia en Cisjordania en la que los niños son también un objetivo. Soldados y colonos matan con impunidad. Un menor cada semana en 2025. 

Varias niñas observan a soldados israelíes en la Ciudad Vieja de Hebrón.
Varias niñas observan a soldados israelíes en la Ciudad Vieja de Hebrón. (Mosab SHAWER | MIDDLE EAST IMAGES | AFP)

Lo último que Mohamed al Halaq, de 9 años, hizo el pasado 16 de octubre antes de que una bala perforase su abdomen fue jugar al fútbol con sus amigos: un disparo de un soldado israelí acabó con su vida, al igual que con las de más de 200 niños y niñas que han sido abatidos por fuego israelí en Cisjordania, desde el 7 de octubre de 2023.

Alia, la madre del pequeño y de otros cuatro hijos menores de 15 años, no logra contener el llanto mientras conversa con Efe sentada en el sofá de la humilde vivienda familiar; localizada en la remota aldea de Rihiya, en el sur de Hebrón.

Su hija Sila, de 6 años, le seca las lágrimas con un pañuelo, cuando se ve forzada a detener su relato. También es Sila quien le pregunta si Mohamed no puede bajar del cielo para acompañarla, como hacía cada día, hasta la puerta del colegio de chicas.

«Quiero que el soldado que mató a Mohamed sea juzgado y castigado y que lo que yo sufrí no lo sufra ninguna otra mujer palestina. Hasta mis 33 años no había vivido un dolor similar a la muerte de Mohamed. Mi corazón está roto», dice Alia.

La familia ha ido reconstruyendo lo que sucedió el pasado 16 de octubre gracias a testigos y familiares, que llevaron en coche el cuerpo ensangrentado del niño al hospital de la cercana ciudad de Yatta. Quienes lo trasportaban optaron por tomar una carretera secundaria, por miedo a ser detenidos por los mismos vehículos militares que habían invadido Rihiya: alargando el trayecto 30 minutos, mientras Mohamed se desangraba.

Su muerte fue declarada a las 19.07, según un parte médico, tras practicarle 10 ciclos de reanimación cardiopulmonar (300 compresiones en el diminuto pecho).

Los niños palestinos son «terroristas»

La muerte de Mohamed no es una excepción. Como él, el Ejército, y en algún caso colonos israelíes, han matado a otros 45 niños en Cisjordania y Jerusalén Este, según el Ministerio de Sanidad y documentación de la ONG Defense for Children Palestine. Esto equivale a la muerte de un menor cada semana.

Desde el inicio de la ofensiva bélica contra Gaza, que ha servido de escudo a Israel para desencadenar una espiral de violencia, demoliciones y nuevos asentamientos en Cisjordania, la cifra de palestinos a los que Israel ha matado se eleva a más de un millar, entre ellos 213 menores de edad, según la OCHA.

El Ejército israelí –que no ha respondido a las preguntas de Efe– dijo sobre la muerte de Mohamed a la prensa local que las tropas dispararon «a sospechosos de lanzar piedras», y que una investigación a cargo de la Policía Militar –que suelen cerrar en meses sin consecuencias– sigue abierta.

Las respuestas proporcionadas por portavoces castrenses a 19 de esas 46 muertes de menores revela –tal y como pudo constatar Efe– cómo Israel tiende a acusar a los niños de haber lanzado artefactos explosivos, piedras o incluso «botellas que contienen ácido» con independencia de que testigos o evidencias visuales lo corroboren. En al menos ocho casos (el 42% de los 19), el Ejército describe como «terroristas» a los menores.

«Los niños palestinos son terroristas, mientras que los niños estadounidenses o israelíes no», clama Bahjat, el padre de Mohamed. «¿Por qué la vida de mi hija –dice señalando a Sila– vale menos que la de los demás?», insiste, y dice que ya tienen suficiente con no poder viajar o estudiar fuera debido a la ocupación israelí.

Alia describe, además, cómo una capitana del Ejército vino a interrogarles y a grabar el lugar donde lo mataron. Pero asegura que les amenazó diciendo que les iban a hacer lo mismo que en Gaza o en Yenín (norte de Cisjordania), donde el Ejército ha expulsado de sus casas a más de 20.000 palestinos desde enero.

Una rara investigación castrense –quizá la única finalizada este año– abarca las muertes en enero de dos primos de 8 y 10 años –y otro de 23– en el ataque de un dron israelí contra el campamento de refugiados de Tamún, en la gobernación palestina de Tubas.

El Ejército reconoció haberles confundido con «adultos colocando un artefacto explosivo» antes de que el comandante a cargo de Cisjordania aprobara el disparo, según reveló el diario "Haaretz". Más tarde, el Ejército no halló explosivos en el lugar y no existe ningún proceso penal contra los perpetradores.

«Los soldados gozan de total impunidad para actuar con brutalidad e incluso asesinar», dice a Efe un portavoz de la ONG israelí B'Tselem, que obtuvo un vídeo en el que aparece Mohamed de espaldas, con los brazos cruzados, poco antes de ser disparado desde lejos.

«El claro mensaje que transmite el liderazgo israelí a los soldados y colonos es que las vidas palestinas son prescindibles», añade esta organización, que considera que el objetivo final es la «limpieza étnica».

Alia recuerda con cariño que su hijo quería ser cardiólogo. Muestra una foto en el móvil en la que Mohamed juega con un estetoscopio de plástico. Pero sabe que está muerto e intenta hallar consuelo repitiendo que era inocente y que nunca hizo nada malo.

«Mi hijo está vivo con Dios. Es un orgullo para nosotros y, a pesar del gran dolor, hay una satisfacción personal porque morir como mártir  es un honor», asegura.

Nuevos ataques de colonos

A las incursiones de los soldados se suman, además, los ataques de colonos, más violentos y recurrentes desde el inicio de la ofensiva contra la Franja de Gaza. Casi siempre con protección del Ejército y siempre impunes.

En el último, este sábado, han resultado heridas al menos once personas, entre ellas paramédicos y periodistas, durante un ataque de colonos en la aldea palestina de Beita, cerca de Nablús.

«Es la primera vez que veo bárbaros. Están locos. Atacan a todos, la periodista se agachó y, aun así, la atacaron una y otra, y otra, y otra vez», ha explicado a Efe uno de los testigos del ataque, Munthar Amira, en mensajes de audio.

Entre los heridos está la periodista de la agencia Reuters Ranin Sawaftah, la única, según este testigo, que ha recibido una paliza a manos de los colonos. Los demás heridos lo han sido por el impacto de las piedras que los colonos han lanzaron contra ellos.

Otro de los afectados es el periodista de la cadena catarí Al-Jazeera Mohammed Al-Atrash.

Los colonos se han lanzado a atacar a un grupo de más de una veintena de palestinos y activistas israelíes que participaban en la recogida de la aceituna de la localidad. En las imágenes del momento se ve cómo los participantes en la recolecta salen corriendo, mientras se escucha de fondo «¿dónde están?».

Este octubre, en el marco de la recogida de la aceituna, ha sido el mes más violento desde que existen registros en materia de ataques de colonos, con 536 según la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (Unrwa).

La Comisión de Resistencia a la Ocupación y al Muro del Gobierno palestino eleva aún más la cifra, con 750 agresiones.

Hamas ha llamado este sábado a la comunidad internacional y la ONU a condenar las agresiones de los colonos israelíes contra palestinos en la Cisjordania ocupada y a presionar a Israel para que ponga fin a esos ataques.

Nueva entrega en Gaza

El hospital Nasser de Jan Yunis, en el sur de Gaza, ha recibido este sábado los cadáveres de 15 palestinos que permanecían en manos de Israel, después de que la Yihad Islámica Palestina devolviera el viernes el cadáver del rehén Lior Rudaef, identificado esta mañana, informó el Ministerio de Sanidad de la Franja en un comunicado.

«El Ministerio de Salud anuncia la recepción de 15 cadáveres de mártires que han sido liberados hoy por la ocupación israelí y entregados por la Cruz Roja, lo que eleva el número total de cadáveres de mártires recibidos a 300», recoge el comunicado.

Solo quedan en la Franja cinco de los 28 cuerpos con los que contaban los grupos palestinos de  al comenzar estos intercambios.

Hasta ahora han sido identificados slo 89 de los 300 cadáveres devueltos por Israel.

En la Franja de Gaza, donde Israel ha matado a al menos 69.169 personas desde el 7 de octubre de 2023, la mayoría menores de edad y mujeres, y ha dejado decenas de miles de mutilados y huérfanos. Más de 10.000 cuerpos siguen bajo los escombros y en las carreteras sin haber podido ser recuperados