La dinámica ‘LPS honi ez!’, que se ha presentado este jueves en Bilbo, ha anunciado su «firme compromiso» de llevar a los tribunales el Plan Territorial Sectorial (PTS) de Energías Renovables que el Ejecutivo de Lakua quiere aprobar. «Favorece la expansión masiva de parques eólicos y fotovoltaicos a gran escala, lo que conllevará la destrucción de las zonas de alto monte y rurales», han sostenido.

Según los representantes de esta iniciativa, conformada por más de 40 colectivos y abierta a nuevas incorporaciones, este PTS no garantiza el bienestar de la ciudadanía ni la protección del medio ambiente, sino que prima los intereses de las grandes empresas «que se lucran con el negocio de las energías renovables».

‘LPS honi ez!’ considera que «no es nuevo que nuestros territorios dependan de los intereses económicos y especulativos de unos pocos». «El actual plan, según el anteproyecto que se presenta, también deja la puerta abierta a los intereses especulativos de las grandes empresas energéticas», han advertido.

En opinión de esta dinámica, la ordenación del territorio debería tener como objetivos la protección de zonas de alto valor ecosistémico, cultural y simbólico, y crear las condiciones para mejorar el bienestar colectivo.

Han comentado que el PTS lo hace «en dirección contraria» y que «un diseño empresarial basado en intereses especulativos debe ser sustituido por una planificación basada en intereses ecológicos y sociales».

La dinámica señala que, aunque el PTS se presenta como una medida contra el cambio climático, los contenidos del Plan demuestran que «no hay voluntad real de adoptar medidas eficaces para hacer frente a la crisis ecológica y climática». Subrayan que la expansión masiva de las renovables no cuestiona el actual modelo de consumo y se enmarca en la lógica de la creciente demanda de energía.

Carácter «antidemocrático»

Además, denuncian el carácter «antidemocrático» del proceso de diseño y aprobación del PTS y advierten de que se ha avanzado sin tener en cuenta la oposición expresada por los movimientos populares, los criterios de las instituciones científicas y más de 4.000 alegaciones presentadas.

Asimismo, apuntan a que el mapa de «territorios aptos» que se dibuja en el anteproyecto del PTS incluye las localizaciones de algunos proyectos que el propio Gobierno autonómico ha tenido que rechazar por su grave impacto ambiental.

La dinámica considera que no hay ninguna razón que justifique este PTS, «lo contrario debería rechazarse». En un contexto de «inmovilismo político, destacan que corresponde a los agentes populares responder y organizarse ante una ofensiva de esta envergadura.

Por ello, a través de ‘LPS honi ez!’, reiteran su compromiso para hacer frente a lo que el PTS está a punto de aprobar y defender los intereses de la ciudadanía. Su objetivo es claro: demandar el plan y llevar la denuncia de la causa a la calle de forma amplia y unitaria.