Nuevo campeón, mismos favoritos
Con cinco equipos disputando la Euroliga, la Liga ACB arranca a partir de esta noche su última campaña con 18 equipos en liza.
Artikulu hau irakurtzeko
erregistratu doan edo harpidetu
Dagoeneko erregistratuta edo harpideduna? Saioa hasi
Klikik gabe gelditu zara
No hacía falta, pero Joan Sastre certificó con un mate a la contra el triunfo de Valencia Basket en la finalísima de la pasada Liga ACB. Después de muchos esfuerzos y mucho dinero invertidos, la escuadra taronja rompía el «duopolio» del Real Madrid y el Barça que, desde el título de Saski Baskonia en 2010, tiranizaba la Liga ACB. Con Erick Green de MVP, más Tibor Pleiss –y las ausencias de Latavious Williams y Abalde– el triunfo valenciano en la Supercopa ante Gran Canaria certificó que 2017 fue su año. No será favorito, pero Valencia Basket le ha dado la bienvenida a este curso baloncestístico 2o17/18 recordando que hay un nuevo campeón.
Un nuevo campeón en un formato de 18 equipos que, si el CSD y la FEB no lo impiden, toca a su fin. En dos años la Liga ACB tendrá 16 participantes, fruto de la presión de los clubes que disputarán la Euroliga, una Euroliga que, de sus 16 participantes, tendrá cinco salidos de la ACB. Es decir, que si Real Madrid, Barça, Baskonia, Valencia Basket y Unicaja se van a ver agobiados, los equipos de abajo, sobre todo los Zaragoza, Burgos, GBC y quizá Joventut, bastante tendrán con librar el descenso.
Dos velocidades
Más que nunca, la ACB tendrá dos velocidades, pero eso puede que no le quite interés, sino que se lo dé. Los clubes de Euroliga han armado plantillas de más de 12 jugadores –salvo Saski Baskonia–, pero eso no impedirá que exista el cansancio en estos equipos, la presión de jugadores que solo jueguen partidos «fáciles», y que los equipos pequeños, con tiempo para preparar sus partidos, puedan hincarles el diente en más de una ocasión.
Ya el año pasado fue propicio para que los grandes de la ACB tropezasen más de la cuenta en la Liga Regular, amén de que se notaron las ausencias –sobre todo el Barça, así como los equipos Eurocup, por ejemplo Bilbao Basket– y la falta de gasolina –Saski Baskonia y Real Madrid– en los play offs, coyuntura que Valencia Basket, con todo merecimiento, aprovechó para coronarse campeón.
Se conoce que los apostantes prefieren apostar a tiro hecho, y a día de hoy, con el arranque liguero en plena cuenta atrás, Barcelona y Real Madrid son las principales opciones de quienes se juegan los cuartos, a pesar de lesiones de larga duración como la de Llull, o de que el Barça llega de una campaña calamitosa, en el que Navarro, amén de reclamar minutos aunque el físico ya se lo impide, se lleva parte del presupuesto de la sección baloncestística del Barcelona. Curiosa papeleta que le ha caído a Sito Alonso, que aterriza en el club blaugrana después de salir por la puerta falsa del Baskonia.
Mirando a las islas
Herbalife Gran Canaria estuvo muy cerca de revalidar la Supercopa, y lo cierto es que, por detrás del quinteto de la Euroliga, tiene muchas papeletas de ser algo más que un outsider. El crecimiento de Eriksson, Paulí y Pasecniks, las llegadas de McKissic y Mekel y los eternos Oliver y Báez, han armado un equipo fuerte. Andorra, a la chita callando, también aspira a dar otro paso en su evolución.
En Tenerife han perdido a Vidorreta, Grigonis o Dornekaamp, pero los de Nenad Markovic recién han ganado la Copa Intercontinental y ya se sabe, quien ha ganado una vez, quiere volver a conseguirlo y además sabe cómo lograr sus objetivos.
Pablo Prigioni no quiere «excusas» pese a empezar la Liga ACB lleno de bajas
Saski Baskonia viajó ayer a Barcelona para comenzar la Liga ACB 2017/18 esta misma noche, a partir de las 21.00, en el Palau Blaugrana. Enfrente, todo un Barça entrenado por Sito Alonso y en el que destaca la figura del excapitán baskonista Adam Hanga. Y para más inri, el estreno de Pablo Prigioni al frente del banquillo baskonista se producirá con las bajas por lesión de McRae, Garino, Shengelia y Beaubois. Pero acude al estreno liguero con ilusión y «sin poner excusas».
«Rodri –Beaubois– todavía no está, Patricio –Garino– y Toko –Shengelia– tampoco, ni Jordan –McRae–. Pero al final da igual quién esté. Tenemos jugadores para competir y eso es lo importante. Tenemos suficiente calidad en la plantilla para hacer un buen partido y no sirve de nada lamentarse», explicaba el nuevo preparador baskonista.
El de Río Tercero se mostraba «ilusionado por que lo que estás haciendo cuente», y quizá por eso prefirió centrar su discurso de la previa a lo que su propio equipo puede ofrecer antes que mirar al rival. «Es difícil saber qué nos vamos a encontrar. Al ser un primer juego, no hay mucha previa con la que estudiar al rival, así que mejor centrarnos en los que nosotros podemos hacer bien, salir allí y competir cada balón. Ahí está la clave», zanjaba.
Prigioni abogó por «no inventar nada, sino jugar el baloncesto que hemos jugado en la pretemporada. Da igual qué juguemos, sino cómo lo hagamos».A.G.