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Osasuna busca estrenarse lejos del fortín en el que ha convertido El Sadar

Osasuna rinde visita al Almería –Power Horse Stadium, lunes, 21.00, Movistar– con la idea de trasladar a sus desplazamientos el mismo poderío local que ha mostrado hasta ahora.

La baja de Aimar Oroz puede posibilitar que Moi Gómez juegue más centrado en Almería. (Jagoba MANTEROLA | FOKU)

Mantener la misma línea de regularidad que ha mostrado hasta el momento en El Sadar es el reto que se marca Osasuna para el que será su segundo desplazamiento de la presente temporada, tras la derrota por la mínima frente al Betis en el Benito Villamarín.

Una victoria de los rojillos en el estadio almeriense, escenario que tradicionalmente no se les ha dado nada bien, supondría alcanzar la docena de puntos de quince posibles y mantenerse en la zona noble de la tabla.

Y, lo más importante, seguir abriendo una importante brecha sobre algunos rivales directos en la lucha por la permanencia que no han empezado con buen pie el presente campeonato liguero.

Para ello, la escuadra navarra tendrá que ser más precisa y efectiva en los metros finales de lo que lo fue en Sevilla, donde generó y llegó, pero no estuvo acertada en varios lances con marchamo de gol.

No podrá contar el técnico osasunista, Jagoba Arrasate, con una de las piezas que más claridad ha tenido en este apartado en este inicio competitivo. Aimar Oroz no ha entrado definitivamente en la lista por unos problemas en su tobillo izquierdo que le han impedido entrenar con sus compañeros en las últimas sesiones.

Ello puede permitir que Moi Gómez recentre su posición –el jugador ha confesado que se siente mejor en dicho puesto del campo– y que el preparador de Berriatua dé entrada de inicio al reciente goleador Rubén García o Darko, en función de que se priorice toque o músculo.

También podría partir como titular Abde, después de su papel estelar en la úlitma victoria frente al Rayo, al protagonizar la jugada invidual que acabó derivando en el 2-1 definitivo.

Por lo demás, pocas novedades se esperan en el once rojillo, habida cuenta del buen rendimiento que está ofreciendo la línea defensiva y la sala de máquinas del conjunto navarro.

Más apreturas tiene el Almería –un triunfo y un empate en estas cuatro jornadas–, quien querrá resarcirse de la derrota frente al Valladolid (1-0) y que ya dio muestras de su potencialidad en propio campo al vencer al Sevilla.

Está por ver si los anfitriones salen con dos o tres centrales, donde parecen tener plaza fija Ely –ha trabajado con una máscara tras recibir varios puntos de sutura– y Babic.

Arrasate: «Sudar tinta»

Arrasate le ha dado gran mérito a los tres triunfos cosechados hasta el momento, porque «para ganar partidos tenemos que sudar tinta». «Cuando sabes lo que cuesta una cosa, no te relaja, al revés, te hace saber lo difícil que es y darle valor», ha ampliado.

Por eso, volver a hacerlo en el Power Horse Stadium, «un campo muy complicado», será una tarea harto complicada, frente a un rival «poderoso en lo físico, intenso y bien trabajado, cuya adaptación a Primera está siendo muy buena».

En cuanto a lo que espera de los suyos, el míster vizcaino ha señalado que «esto se trata de ser solvente, competitivo, de hacer las cosas bien y saber que es muy difícil dominar a los rivales. Necesitamos generar como lo estamos haciendo, pero defensivamente requerimos ser un equipo fiable».

Respecto a la importante baja de Aimar Oroz, ha indicado que «son cosas que hay que asumir con naturalidad». «Estaba en un buen momento, por eso ha jugado los cuatro partidos, pero en eso soy de cambiar de chip rápido y pensar en cuál es la solución para poder hacer un buen partido», ha contrapuesto.

Por último, también se ha referido a las futuras perspectivas que se han desatado con motivo del notable inicio liguero. «Creo que es demasiado pronto para hablar de otras cosas que no sea el partido de mañana. Las expectativas hay que manejarlas bien porque al final pueden hacer mucho daño. En cuanto a la ilusión, mientras se genere y se cree, es bueno», ha concluido.