Irlanda acogerá la Eurocopa, pero le falta una selección que la represente

Con los calendarios cada vez más sobrecargados, el balón nunca se detiene y vuelve el fútbol de selecciones. Las clasificatorias para la próxima Eurocopa que se celebrará este verano en Alemania entran en su fase decisiva en los próximos días. Al mismo tiempo, la UEFA ha confirmado que Inglaterra, Gales, Escocia e Irlanda acogerán el torneo en 2028, mientras la edición de 2032 se celebrará en Turquía e Italia.

Al igual que ocurrió con San Mamés, Dublín se quedó sin albergar partidos en la última Eurocopa por la pandemia del coronavirus y ha recibido con entusiasmo la designación. Irlanda ya tiene su Eurocopa porque Belfast también ha sido elegida como una de las sedes.

Al ser una candidatura conjunta, la UEFA no otorgará la clasificación inmediata a las federaciones organizadoras. El torneo contará con 24 selecciones y todavía falta conocer cómo se desarrollarán las clasificatorias. La intención del organismo europeo es guardarse dos billetes directos para las selecciones organizadoras que no consigan clasificarse de forma directa. El pase se otorgaría en base al mejor coeficiente.

Inglaterra parte como una de las favoritas, mientras Escocia y Gales están peleando por disputar la Eurocopa de Alemania. La situación de la República de Irlanda, y la del combinado que representa a la federación del norte de la isla, es bien distinta. Su nivel ha caído de manera estrepitosa en los últimos años y apenas cuentan con opciones de entrar en la repesca para el próximo torneo. Irlanda se mide este viernes a Grecia en Dublín y el lunes visita a Gibraltar, único equipo al que ha ganado. Por su parte, Irlanda del Norte recibe a San Marino el sábado en Belfast y el martes a Eslovenia.

Ambas selecciones participaron en la fase final de la Eurocopa disputada en el Estado francés en 2016. Desde entonces, no han vuelto a participar en ningún torneo internacional. La selección del norte de Irlanda alcanzó el puesto 24 en el ránking de la FIFA en 2017, su mejor posición desde los noventa, y en estos momentos se encuentra en el puesto 74. Ha perdido los últimos cinco partidos oficiales de manera consecutiva y no ha podido pelear por la clasificación en un grupo con Eslovenia, Dinamarca, Finlandia y Kazajistán. El defensa Jonny Evans, que ha vuelto al Manchester United a los 35 años, sigue siendo su jugador más emblemático.

La selección de la república del sur de la isla también ha perdido nivel y ocupa el puesto 55 en la actualidad. Es la peor posición desde 2015 para un combinado que ha pasado por muchos altibajos. La llegada de Stephen Kenny hace casi tres años al banquillo no ha obtenido los resultados esperados. El juego del equipo ha crecido, pero la falta de concentración defensiva y el escaso acierto ha dejado un poso decepcionante. El buen rendimiento ante equipos como Francia y Holanda ha contrastado con derrotas dolorosas frente a rivales como Grecia.

Regeneración

El exjugador Liam Brady aseguraba en su última intervención como analista en televisión que Kenny ha dirigido al grupo de jugadores con menor calidad que ha conocido. Según argumentaba, el equipo no dispone de centrocampistas para controlar el juego y criticaba la insistencia del seleccionador en el juego de toque. En su opinión, lo importante en el fútbol es sacar resultados con los jugadores que dispones y no implementar un estilo.

Brady ha asistido esta semana al festival Thinking Football que organiza la Fundación del Athletic. Ha acudido a la presentación de un documental sobre su trayectoria como centrocampista en el Arsenal y su paso por Italia, donde jugó en la Juventus y ganó títulos.

Con la duda sobre la continuidad del técnico, se atisba una regeneración en el equipo irlandés. La irrupción del atacante Evan Ferguson, que está a punto de cumplir 19 años, y el portero Bazunu, de 21 años, son los brotes verdes a los que se agarran para no perder la esperanza. El delantero del Brighton, del alabado técnico Roberto de Zerbi, lleva 10 goles en 27 partidos de la Premier en menos de un año. Es la estrella emergente sobre la que construir un bloque competitivo.

Asimismo, James McClean ha anunciado su retirada de la selección y se despedirá en noviembre. El de Derry ha disputado 102 partidos con la camiseta verde y es uno de los futbolistas más carismáticos para los aficionados. Además de su pundonor y casta en el campo, McClean es una referencia para el fútbol irlandés al decantarse por jugar con la república y rechazar a la selección del norte por su simbología unionista.

El conflicto político persiste

Voces autorizadas como el mítico George Best reivindicaron en su día conformar una única selección para representar a la isla como ocurre en el rugby. La división se mantiene desde hace más de medio siglo y el conflicto político sigue vigente. A pesar de que la reunificación de la isla se presume cada vez más cercana tras el Brexit, el bloqueo unionista al Gobierno compartido con el Sinn Féin persiste en las instituciones del norte de la isla.

Es una de las razones por las que la remodelación del estadio de Casement en el oeste de Belfast, bastión del republicanismo irlandés en la ciudad, no se ha ejecutado. Con una capacidad para 34.000 espectadores, es el campo que acogería los partidos de la Eurocopa de 2028 y también se utilizará para deportes gaélicos.

Por otro lado, en el festival Thinking Footbal del Athletic se ha proyectado otra película sobre el fútbol irlandés a través de la figura de Jimmy Hastly. Un jugador que llevó al Dundalk a ganar la liga, pese a perder su brazo izquierdo, y falleció en 1974 en un atentado de paramilitares lealistas. La hazaña de Camerún en el Mundial de Italia en 1990 y el éxito de la Sampdoria de Vialli y Mancini, que alcanzó la final de la Copa de Europa, han sido otros de los documentales emitidos.