Una cadena humana une Gobierno y Parlamento navarros para exigir un salario mínimo propio
Una cadena humana convocada por los sindicatos ELA, LAB, Steilas, ESK, Etxalde e Hiru ha unido simbólicamente este jueves el Gobierno y el Parlamento navarros para exigir un salario mínimo propio, porque «uno de cada dos asalariados no tiene ingresos suficientes para desarrollar una vida digna».
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Tras ser vetadas las diferentes iniciativas que han puesto en marcha hasta ahora para lograrlo, una cadena humana convocada por los sindicatos ELA, LAB, Steilas, ESK, Etxalde e Hiru ha unido Gobierno y Parlamento navarros para exigir un salario mínimo propio para el herrialde, ya que el fijado a nivel estatal «no permite desarrollar una vida digna a uno de cada dos asalariados».
Así se ha recalcado en ese acto, en el que se han lanzado consignas como «SMI propio ya», «Hemen lan egin, hemen erabaki», «Gobierno y patronal, alianza criminal» o «Terrorismo es no llegar a fin de mes», y en el que se ha desplegado una pancarta con el lema ‘Nafarroako Gobernua, CEN, UGT eta CCOO pobreziaren errudunak. ¡SMI navarro ya!’.
Entre las personas que portaban esa pancarta figuraban Igor Arroyo, coordinador general del sindicato LAB, y Mitxel Lakuntza, secretario general del sindicato ELA, quienes han explicado a los medios el motivo de la cadena humana.
Arroyo ha señalado que así «queremos mirar de frente a una realidad contundente y es que uno de cada dos asalariados navarros no tiene ingresos suficientes para desarrollar su vida con independencia, con suficiencia, con dignidad».
En este sentido, ha recordado que las instituciones europeas recomiendan «un salario mínimo aproximado al menos de 1.600 euros en Navarra, pero aquí se nos impone el salario mínimo a nivel del Estado totalmente insuficiente para hacer frente al coste que la vida tiene en Navarra».
Por ese motivo, establecer un salario mínimo propio «beneficiaria a las personas que cobran menos, contribuiría a reducir la brecha salarial machista, racista, que existe en Navarra, pero también a elevar los salarios y a un mejor reparto de la riqueza».
Y para conseguirlo, ha recordado que existen «dos vías: la negociación colectiva y la parlamentaria». Sin embargo, ambas han sido rechazadas al negarse a negociar la patronal y al ser vetada en la Cámara la ILP respaldada por más de 18.000 firmas para conseguir ese SMI propio.
¿Qué tipo de autogobierno?
Al respecto, el coordinador general de LAB le pregunta al Gobierno de Nafarroa que «cuando tanto se habla de autogobierno, qué tipo de autogobierno es aquel que no tiene capacidad para regular algo tan básico como son los ingresos mínimos de la gente».
Y también se ha preguntado que «cuando se habla tanto de diálogo social, qué diálogo es ese que se pasa treinta años haciendo fotos y reuniones sin sacar ninguna medida concreta que beneficie a la clase trabajadora. Y cuando vamos LAB y ELA a presentar una propuesta concreta, viable, razonable para establecer un salario mínimo propio en Navarra, ni siquiera se sientan a negociar y no se sientan ni la patronal, ni UGT, ni CCOO en connivencia de la propia patronal».
Pero les ha asegurado que «si piensan que vamos a cejar en nuestro intento, están equivocados. No vamos a dejar a nadie atrás».
En similares términos se ha expresado el secretario general del sindicato ELA, quien ha recordado que «ningún partido, ninguna patronal, ningún sindicato puede defender que en Navarra se pueda vivir con 1.184 euros», el salario mínimo fijado en el Estado.
Ha calificado la reivindicación de ese SMI propio para Nafarroa como «central, porque nos permite luchar contra la precariedad, contra la brecha salarial» y avanza en el reparto de la riqueza, que es algo que «la clase política navarra no está haciendo, ya que las reformas fiscales que se vienen haciendo han sido para bajar impuestos a las empresas».
Además permite profundizar «en la soberanía» y en este sentido, ha querido subrayar «el carácter político del salario mínimo propio y por ese motivo, con la ILP que se nos echó atrás queríamos activar un trámite parlamentario para que Navarra tenga la competencia para decidir el salario propio».
Plantear una proposición de ley
Tras ser vetada esa posibilidad, Lakuntza ha recordado que existe la opción de que cualquier partido político presente en el Parlamento de Nafarroa «pueda plantear una proposición de ley en este sentido para que sea debatida».
Al respecto, Arroyo se ha mostrado convencido de que puede haber partidos interesados en plantear esa proposición de ley, «pero la cuestión es si va a haber una mayoría parlamentaria. Y especialmente qué postura van a tener los partidos del Gobierno».
En este sentido, el coordinador general de LAB ha insistido en que la cuestión de un SMI propio la «debería solventar el Gobierno con sus políticas públicas. Debería ser algo que debería partir de una iniciativa del propio Gobierno. Lo que es anómalo es que le dé la espalda y esperamos que cambie de actitud, porque es inadmisible».
En esa línea, Lakuntza ha denunciado la posición del Ejecutivo navarro y «personalmente de la presidenta Chivite, que se ha negado a recibir al 40% de la representación sindical para tratar este tema. Que nos haya cerrado la puerta es una posición antidemocrática que no se puede entender. Se tiene que sentar a escuchar. Y le mandamos un mensaje para que rectifique y ponga fecha, hora y lugar para la próxima reunión».
Y a la CEN, UGT y CCOO les ha planteado avanzar «en otra vía que tiene que ver con la posibilidad de alcanzar un acuerdo interprofesional entre patronal y sindicatos, a la que se están negando» incluso para negociarla, en una actitud, especialmente de los sindicatos, que «nos parece injustificable».
Ambos líderes sindicales han insistido en que «no vos vamos a rendir y vamos a seguir presionando sindical y políticamente hasta conseguir un SMI propio para Navarra».