IKER FIDALGO ALDAY
PANORAMIKA

Testigos

Si las vanguardias de principios del siglo XX suponían en cada ocasión una ruptura con lo anterior y un intento de crear grietas estéticas y políticas con los movimientos predecesores, años después y finalizados los procesos de mayo del 68, comienzan a abandonarse los grandes discursos para dar paso al protagonismo de una serie de corrientes tanto políticas como estéticas en las que la defensa de las minorías y lo personal adquieren el protagonismo principal. El sujeto posmoderno se enfrenta a la soledad, al desencanto social y a la necesidad de reivindicar conceptos antes eclipsados por las grandes utopías. Las temáticas en el arte varían y se adaptan (o deberían) en función del diagnóstico de la sociedad que nos rodea. Las propuestas que analizamos a continuación responden a un latido social actual y vivo.

Sebas Velasco (Burgos, 1988) presentó el pasado diciembre la exposición “Demain c’est loin (mañana está lejos)” en SC Gallery de Bilbo. El trabajo de Velasco, muy vinculado a la cultura urbana y al grafiti, aparece en esta ocasión en forma de pintura. Ejercida con una soberbia técnica, nos propone un matrimonio impecable entre la presencia de la materia con un óleo muy presente y una figuración sobrecogedora que, aunque eminentemente realista, posee su propia fuerza pictórica. Aun así, la lógica de la luz y el encuadre responden a un tratamiento en ocasiones fotográfico, incluso de «mala» fotografía, a través de flashes blancos y luces parpadeantes. Esta fuerza lumínica nos remite a unos espacios urbanos tratados desde la inmediatez, desde lo cotidiano y lo efímero, e incluso desde lo marginal, lo escondido o lo ilegal. El contraste entre un trabajo claramente costoso y la espontaneidad de los momentos captados hacen de la muestra una parada necesaria para acercarse al trabajo sincero del artista burgalés que estará disponible hasta el día 8 de este mes.

Miriam Isasi (Gasteiz, 1981) inauguró a mediados de enero la exposición “Lanzamiento de Moneda”, que se clausura hoy, día 6, en la Sala Rekalde de Bilbo. Isasi, que a pesar de su juventud posee una amplia y potente trayectoria, presenta el trabajo resultante de las Becas de Creación Artística de la Diputación Foral de Bizkaia, dentro del programa Barriek 2016.

Las propuestas de Isasi suponen en muchas ocasiones enfrentarnos a una incomodidad placentera. Recordando trabajos recientes, como “Equilibrio inestable (2013)” o “Energía Robada (2012-2013)”, los proyectos requieren de un esfuerzo que desestabiliza la cómoda posición de espectadores. Nos obliga a palpar la potencia política de la documentación que aparece a veces como los restos de un proceso en el que la obra es intangible, pues consta de gestos, actitudes o acciones que ya sucedieron. En este caso, la potencia poética reside en una metáfora construida bajo códigos visuales de la cetrería y que nos empuja a un debate interno sobre nuestra posición en una sociedad que necesita de depredadores y de víctimas para sustentar una tensión estructural continua. Sobrevuelan en el espacio expositivo conceptos como la muerte, el azar o la violencia, todos ingredientes inherentes pero necesarios en los devenires de la vida que Isasi nos presenta como un desafío que a veces puede llegar a escocer.