Estos días estamos metidos de lleno en la campaña de la Renta 2018, por lo que toca realizar las declaraciones de nuestros haberes. En realidad, Hacienda conoce todo sobre nosotros, más si somos mileuristas o jubilados, y por eso se presta a confeccionarlas gratis. Si bien el número de “agraciados de gestoría” aumenta en cada ejercicio, no debemos tirar la toalla ya que puede haber datos no recogidos que nos beneficien. En el caso de los alquileres de vivienda habitual tenemos una baza, pues tanto en Nafarroa como en la Comunidad Autónoma Vasca, ambas Haciendas tienen una deducción propia por este concepto. Eso sí, cada una con su libro de estilo.

La Hacienda de los tres territorios de la CAV permite una deducción por alquiler de vivienda habitual del 20% de las cantidades satisfechas en el período impositivo, con un límite cuantitativo a 1.600 euros anuales.

La Hacienda foral de Nafarroa establece una deducción del 15% del dinero pagado durante el pasado ejercicio fiscal hasta un máximo de 1.200 euros anuales, siempre y cuando concurran estos requisitos: que las rentas del contribuyente no superen los 30.000 euros (60.000 euros en el caso de tributación conjunta), que las cantidades satisfechas en concepto de alquiler supongan más del 10% de las rentas y que se justifique mediante la presentación del contrato de arrendamiento y de los recibos de pago correspondientes.

La deducción podrá ser del 20%, hasta un máximo de 1.500 euros anuales, cuando el inquilino tenga menos de 30 años. De estos beneficios tampoco salen mal parados sus propietarios, pues tienen deducciones por alquilar la vivienda. Pero este es otro cantar, ya que gozan de una propiedad vitalicia. Por tanto tenemos datos que aportar, previa revisión minuciosa de los que ya vienen marcados. Eso sí, en plazo y por los medios que nos facilitan (teléfono, web de Hacienda, o presencial), que ya nos advierten que es solo una propuesta de declaración. Y toca esperar, pues aunque la victoria sea pírrica menos da una piedra. Para algo vale aquello de que “Hacienda somos todos y todas”.