BERTA GARCIA
CONSUMO

Textiles con sustancias tóxicas

El negocio textil marcha viento en popa, sobre todo para un reducido grupo de magnates que lo controlan a nivel mundial y hacen suyo el lema de “renovarse o morir”. En esa búsqueda industrial por renovarse, han ido entrando en la composición de los tejidos fibras mucho más baratas y métodos que son los responsables, en parte, no solo del abaratamiento de los productos sino del incremento de toxicidad para el medio-ambiente y las personas.

Hoy se utilizan más de 1.500 sustancias químicas para blanquear los tejidos, teñirlos, impermeabilizarlos o hacerlos resistentes a las arrugas, y la mayoría de ellas ni siquiera están clasificadas en términos de toxicidad. De ahí que la industria textil ocupe el segundo puesto como industria más contaminante (tras la petrolífera).

Las novedades no cesan y aprovechando el gran interés social por cuidar el cuerpo y su lucha contra la obesidad las industrias textiles han encontrado otro filón precioso fabricando prendas que se presentan como la panacea contra los kilos de más y el elixir de la juventud, pues no solo hacen la guerra a la grasa sino que proporcionan a la piel hidratación, elasticidad y suavidad. O esto al menos es lo que publicitan, es decir, prendas con propiedades sanitarias.

La normativa, aunque obsoleta, está para cumplirse y, a pesar de que no desarrolla apenas los aspectos de composición de los productos, al menos los legisladores han tocado el aspecto publicitario. Si el producto entra en la Unión Europea, su distribución y comercialización tiene que estar en regla. En el Estado español rige un decreto sobre publicidad y promoción comercial de productos, actividades o servicios con pretendida finalidad sanitaria, que dice: “Se prohíbe cualquier clase de promoción de materiales, sustancias, energías o métodos con pretendida finalidad sanitaria que sugieran propiedades específicas adelgazantes o contra la obesidad, proporcionen seguridades de alivio o curación cierta o sugieran o indiquen que su uso o consumo potencian el rendimiento físico, psíquico, deportivo o sexual”.