Habitar en torno a cuatro atrios
Otra arquitectura es posible, incluso en lugares tan turistizados como Ibiza. La autora explica el premiado proyecto de los arquitectos Adrià Guardiet y Sandra Torres del estudio 08014 Arquitectura. Vivienda protegida, bioclimática, soluciones sostenibles y promoviendo la vida en comunidad.

El Instituto Balear de la Vivienda (IBAVI) ha establecido un precedente en la gestión y mejora del acceso a la vivienda pública, tratando de paliar la actual situación de emergencia habitacional que enfrenta nuestra sociedad. Como organismo público responsable de la promoción y del alquiler de vivienda protegida en Baleares, ha puesto el énfasis en la necesidad de que las administraciones logren una combinación efectiva entre las políticas promovidas y las soluciones arquitectónicas.
Un caso representativo es el proyecto de 24 viviendas públicas en Platja d’en Bossa (Ibiza), finalizado en 2022 y obra de los arquitectos Adrià Guardiet y Sandra Torres del estudio 08014 Arquitectura. Ha sido seleccionado y finalista en varios reconocimientos y ha ganado el Premio de Bioconstrucción de Catalunya 2024, el Premio MAPEI a la arquitectura sostenible 2023 y el de la XVI Bienal Española de Arquitectura y Urbanismo (BEAU).
La propuesta configura volumétricamente un cubo con cuatro vacíos interiores, cuya orientación en la parcela se ha rotado 45 grados con respecto a los puntos cardinales principales, de manera que ninguna de sus cuatro fachadas esté completamente alineada a ninguno de ellos.
El programa residencial se organiza en ocho viviendas por planta, apiladas en cuatro niveles y agrupadas en torno a los cuatro patios centrales, compartidos por dos viviendas en cada planta. El espacio central se destina al núcleo de comunicación vertical que incluye escalera, ascensor, circulaciones y accesos a las viviendas.

Esta disposición espacial genera dos perímetros concéntricos de programa. El exterior se relaciona con las fachadas y se compone de espacios de proporción cuadrada y uso indeterminado que permiten configurar salas y dormitorios según las necesidades de sus habitantes. El interior, en cambio, se reserva para las cocinas y se abre a los espacios de relación semi-exteriores de los atrios.
En el contexto actual, marcado por la creciente preocupación por la crisis ambiental y climática, otra de las grandes apuestas del IBAVI ha sido la implementación de soluciones constructivas sostenibles en todas sus promociones de vivienda protegida, siguiendo las directrices de LIFE Reusing Posidonia.
En este sentido, la promoción de Platja d’en Bossa aprovecha los movimientos de tierras del proceso de ejecución de obra para rellenar los bloques de termoarcilla, fabricados en hornos de biomasa, que componen la retícula cuadrangular de muros de carga. Esto permite incrementar la inercia térmica de los cerramientos, además de la reutilización de materiales para evitar la generación de residuos. Asimismo, el aislamiento de las fachadas está compuesto por algodón reciclado y el de las cubiertas por Posidonia Oceánica seca.
Otra de las apuestas de Guardiet y Torres es el uso de la vegetación en diversos espacios del proyecto, especialmente en cubiertas y los cuatro patios centrales, para mitigar los efectos del clima ibicenco. A esta estrategia bioclimática de reverdecimiento de los atrios se le suma un sistema de cerramientos acristalados con protecciones solares, que permite disipar el exceso de calor en verano y acumularlo en invierno.
El proyecto busca generar espacios de encuentro y relación en torno a los cuatro atrios, promoviendo un modo de habitar que favorece la vida en comunidad. En un contexto en el que el acceso a una vivienda digna es un desafío creciente, abre la puerta a nuevas perspectivas que sugieren que el derecho a un hogar puede trascender lo privado para convertirse en una experiencia colectiva.



