Alemania y el Estado francés presentaron ayer una serie de enmiendas a la propuestas de la Comisión Europea (CE) sobre el reparto por cuotas de los solicitantes de asilo que lleguen a Europa. Piden cambiar los criterios de cálculo propuestos por Bruselas para determinar la cuota que debe acoger cada Estado, de forma que se tenga más en cuenta los esfuerzos realizados en el pasado por cada miembro.

La CE ha propuesto repartir 40.000 demandantes llegados a Italia y Grecia entre el resto de estados miembros para reducir la presión sobre los países más afectados por la crisis migratoria en el Mediterráneo. A Berlín y París se les han asignado las mayores cuotas.

Los ministros del Interior francés, Bernard Cazeneuve, y alemán, Thomas de Maiziere, sostienen que el mecanismo temporal de relocalización debe basarse en el equilibrio de dos principios: la responsabilidad y la solidaridad, algo que no se ha logrado, e insisten en que el reparto deberá primero tener mejor en cuenta los esfuerzos ya realizados por los estados miembros en mecanismos de protección y asistencia, como la admisión humanitaria.

Recordaron que el Estado francés, Alemania, Suecia, Italia y Hungría se reparten al 75% de solicitantes de asilo, una situación que «ya no es sostenible», y reclamaron que los países ribereños del Mediterráneo refuercen, primero, la vigilancia de las fronteras exteriores.