EIBAR 1

CELTA 1

El Eibar volvió a adelantarse para ver de nuevo cómo su rival restablecía el empate en la recta final del encuentro. Un punto al casillero, como el miércoles, aunque poco o nada tuvo que ver el encuentro de anoche con el del Ciutat de Valencia.

Sobre todo por el rival, que llegaba a Ipurua en estado de gracia. En lo más alto de la clasificación, con la moral por las nubes tras noquear al Barcelona tres días antes y con la vitola de equipo más goleador de la categoría. Ahí es nada. También por el desarrollo del choque, en el que, efectivamente, los armeros volvieron a tomar ventaja a las primeras de cambio, pero en el que el empate final se debió bastante más al empuje y el juego de su adversario que a sus errores, que apenas sí existieron pese al ejercicio de concentración y esfuerzo físico que exigió el equipo celeste.

Con las bajas de Escalante por sanción y Keko por problemas físicos, José Luis Mendilibar optó por recuperar a otros dos titulares habituales, Saúl y Enrich. Pero tampoco pudo resistirse a mantener a Inui y Bastón, tras la buena química que mostraron el miércoles. Adrián, además, retrasó su posición para conformar un centro del campo más creativo, lo que dibujaba un Eibar altamente ofensivo. Teniendo en cuenta quién se encontraba enfrente, hubo quien pensó que a los marcadores de Ipurua podían faltarles centímetros para abarcar el marcador final. No fue así, apenas se cantaron dos, pero el intercambio de goles existió y fue duro.

El primero fue un «bastonazo». Como en Valencia, el Eibar saltó al césped con el cuchillo entre los dientes. Y necesitó menos tiempo incluso que entonces, apenas dos minutos, para adelantarse en el marcador. Capa forzó un córner, Saúl lo botó, Enrich lo peinó y Bastón, en estado de gracia, lo transformó en el 1-0.

Intentó hacer el Celta como que no había pasado nada, tratando de mover el balón en busca de sus peligrosos delanteros. Pero el Eibar presionaba arriba, ahogando el juego gallego, y aunque algunos balones en profundidad le metieron en apuros, consiguió que no pasaran demasiadas cosas. O no tantas como cabía esperar ante un rival que atraviesa el momento del Celta. Tampoco pasaron demasiadas cosas en el área de Sergio, así que la tensión se podía cortar con cuchillo.

Insuficiente, aún así, para Berizzo, que metió a Iago Aspas en el descanso. Más dinamita en el área azulgrana, sí, aunque a cambio el Celta se encontró también con un rival más respondón, convencido de que debía, y podía, buscar el gol de la tranquilidad. El intercambio de golpes se recrudeció.

Hasta que Iago Aspas marcó el empate. Con el depósito en la reserva, los armeros quedaron a merced de un Celta que arrolló pero, por suerte, no pudo hacer más sangre.

Las claves

&indentHere;> Como en el Ciutat de Valencia, el Eibar saltó al césped con el cuchillo entre los dientes. Y le costó menos, apenas dos minutos, acertar. Capa forzó un córner, Saúl lo botó, Enrich lo peinó y Borja Bastón, en estado de gracia, lo transformó en el 1-0.&bs;

> El Celta intentó hacer como si no hubiera pasado nada. Pero los azulgranas lograron ahogar a la escuadra gallega y, aunque algunos balones en profundidad les pusieron en apuros, consiguieron que no pasaran demasiadas cosas en su área.

> En el descanso Berizzo metió más dinamita con la entrada de Aspas. Pero también se encontró con un Eibar más respondón, que intentó sentenciar a la contra. El intercambio de golpes acabó con el gol de Aspas, que lanzó a su equipo en la recta final.

Guidetti se lesionó durante el calentamiento

Eduardo Berizzo tuvo que cambiar de planes sobre la marcha. John Guidetti se lesionó durante el calentamiento, con lo que Théo Bongonda ocupó la plaza del delantero sueco en la formación titular y Josep Séñé, inicialmente descartado por el técnico, completó la convocatoria gallega.

Sesión de recuperación para los azulgranas

El Eibar pone fin a una semana intensa con una sesión de recuperación en Atxabalpe (10.30). A partir del martes comenzará a preparar la visita del próximo sábado al Gran Canaria (22.00), para la que Mendilibar recuperará a Escalante, sancionado ayer, y, posiblemente, también a Ramis y Luna.