CELTA 3

EIBAR 2

El acierto manda y el error, más aún. El Celta puso de lo primero y al Eibar le sobró de lo segundo, con lo que los tres puntos se quedaron anoche en Balaídos. También erró el árbitro en una acción clave –se tragó un penalto a Borja Bastón con empate a cero en el marcador– pero responsabilizarle de la derrota azulgrana no haría honor a la verdad.

Los gallegos ganaron porque fueron mejores. Y fueron mejores porque cumplieron con el guión que, aparentemente, llevaban aprendido los dos equipos pero, a la hora de la verdad, solo el del Toto Berizzo supo desarrollar. Jugar en campo contrario, presionar arriba, robar y buscar la portería... Es el abc del Eibar, precisamente el que le permitió llegar a Balaídos defendiendo la sexta plaza, pero ayer brilló por su ausencia en un equipo irreconocible. Aunque en realidad no lo fue tanto por lo que faltó como por lo que hubo, por la ausencia de picante, como por la proliferación de errores. Arriesgados en cualquier caso, imperdonables ante un rival que tiene el mismo instinto asesino y casi idéntico acierto que el propio Eibar. Incluso con dos de sus tres máximos realizadores fuera de combate. Con Iago Aspas ya tiene de sobra para arreglárselas y si además le acompaña un John Guidetti inspirado como ayer, no hay demasiadas opciones para el equipo que realice concesiones en defensa.

Y el Eibar las hizo. Falló Juncà, que regresaba al once tras cumplir su partido de sanción. En los primeros minutos, cuando la noche todavía prometía, el catalán realizó un par de incursiones en territorio enemigo pero a partir de la media hora ni volvió a dar señales de vida arriba, ni fue capaz de frenar a Iago Aspas atrás. Tampoco Mauro Dos Santos estuvo fino. Un error del argentino, de hecho, propició el primer gol celtiña. Ni siquiera Lillo –titular por tercera semana consecutiva, esta vez en su posición–, siempre fiable, cumplió. Pero es que de medio campo en adelante tampoco fue mejor la cosa. Aunque salvó al equipo en la primera ocasión local, Radosevic se vio perdido en su debut como titular, Escalante y Bastón se sintieron demasiado solos y el resto ni atacó ni defendió con acierto, aunque un par de chispazos en los últimos minutos maquillaran el marcador y llevaran los nervios a la grada de Balaídos. Pese al ajustado resultado final fue un desastre, una noche para olvidar, que además dibuja un signo de interrogación en el futuro del Eibar, todavía sin poder definir cuál será su aspiración en los tres últimos meses de temporada, un final plácido y sin tensión o un sueño histórico.

Para que sea lo segundo, el equipo de José Luis Mendilibar tendrá que ofrecer un rendimiento muy diferente al de anoche, cuando solo durante el primer cuarto pareció que podría dar continuidad a sus buenos últimos resultados en el estadio vigués. El Celta estuvo por encima desde el principio, pero un par de contragolpes visitantes, teniendo en cuenta la pegada de la que está haciendo gala esta temporada el Eibar, mantuvieron la emoción. Que pudo ser mayor, y mejor, si el árbitro no se hubiera tragado un claro penalti de Barral sobre Bastón.

No lo vio y ahí se acabó el partido para el Eibar, que comenzó a acumular errores en defensa y su anfitrión a aprovecharlos. A la media hora, Aspas y Guidetti se valían de uno para fabricar el 1-0. Ocho después, Jonny ampliaba distancias con un remate desde el vértice del área.

Nada cambió tras el descanso. Entró Capa pero su equipo siguió igual o peor. La sentencia se veía más cerca de la remontada y, efectivamente, llegó a los veinte minutos de la reanudación, otra vez con la firma de Guidetti. Cosas del fútbol, el partido revivió en la recta final, con un penalti transformado por Saúl y un buen gol de Inui pero la anomalía no pasó de ahí.

Primer partido en el banquillo para Ander Capa

Por primera vez, José Luis Mendilibar dejó fuera del once a Ander Capa, que solo se había perdido un partido por sanción y que, de hecho, era el jugador con más minutos disputados. Asier Riesgo supera ahora al portugalujo.

Entrenamiento tras el regreso de Vigo

La expedición azulgrana regresa esta mañana de Vigo. José Luis Mendilibar ha dispuesto un entrenamiento de recuperación a mediodía. El equipo descansa mañana y el martes empieza a preparar el choque ante el Las Palmas.