Carlos Vela entrenó ayer con total normalidad con sus compañeros en Zubieta por lo que, finalmente, su salida nocturna del domingo y posterior ausencia de la jornada de trabajo del lunes quedará en una multa de alrededor de 10.000 euros.

Frente a la opción de un castigo ejemplar con su apartamiento del equipo durante varios días y con un par de jornadas sin jugar, se ha impuesto la posición más pragmática de la directiva blanquiazul que aboga por la sanción económica y mantener al mexicano en el campo, que es como decir en el escaparate, para no entorpecer así un traspaso económicamente razonable al final de temporada.

Los directivos de la Real tienen claro que su falta ha sido muy grave, más aun tratándose de uno de los capitanes del equipo. Para colmo, este incidente llega después de sus coqueteos con la Liga estadounidense, lo que llena de dudas su compromiso con la entidad blanquiazul y con sus compañeros. Sin embargo, también valoran que dejarlo en la grada debilitará deportivamente al equipo y, sobre todo, abaratará su venta de cara a la próxima campaña.

Evitar el juicio de la grada

Entre otros factores, los rectores del club han valorado también que el partido inmediato es lejos de casa, en Vigo, con lo que se evitan la presumible bronca de la grada contra el jugador. Juegan así con la esperanza de que a Vela le de un arranque de dignidad y tenga un buen día mañana en Balaídos.

Entienden que de esta forma, la próxima jornada ante Las Palmas, un rival teóricamente asequible y si el partido va por buen camino, los aficionados realistas serán más benévolos o, al menos, los pitos se harán más llevaderos para el palco.

Berchiche, optimista para Vigo

A la espera de que Carlos Vela ofrezca o no una rueda de prensa en relación a su caso, quien compareció ayer ante los medios de comunicación fue el defensa Yuri Berchiche, quien insistió una y otra vez en la necesidad de un triunfo mañana (18:15 horas, Moñista+) que permita a la Real seguir enganchada a la parte alta ante un Celta que, advirtió, «tiene una gran facilidad para el gol».

El lateral, un fijo para Eusebio Sacristán, afirmó que afrontan el partido «con mucha ambición, ilusión y ganas de vencer», después de tres jornadas sin conocer el triunfo. Espera a un Celta al que no cree que le afecte la goleada encajada ante el Real Madrid y que «tiene un gran equipo, con gente muy rápida y muy dinámica arriba y te puede marcar en cualquier acción».

Berchiche considera también que la Real no tiene que especular con el marcador, necesita los puntos si quiere seguir con aspiraciones en el tramo final de la temporada y por eso anima a «pensar en positivo y salir a ganar desde que el árbitro dé el pitido inicial». El defensa blanquiazul recordó que si ganan al Celta se quedarían a cuatro puntos de la séptima posición.

Manifestó que a nivel personal se encuentra «bien, con chispa y confianza» –fue uno de los pocos destacados ante el Levante– pero no se conforma con ello porque «siempre se pueden hacer mejor las cosas».

Entrenamiento y viaje

La plantilla realista volverá a entrenar hoy, a mediodía y a puerta cerrada, en las instalaciones de Zubieta. Posteriormente, el entrenador blanquiazul hará pública la convocatoria de los jugadores que formarán parte de la expedición que partirá hacia Vigo a media tarde.

Marcelo Díaz considera que el Celta tiene la «obligación» de ganar

Marcelo Díaz, centrocampista del Celta, declaró que esta semana han trabajado «muchísimo, hemos puesto todo nuestro foco de atención en este partido porque nos enfrentamos a un rival directo y queremos dejar los tres puntos en casa. La obligación la tenemos nosotros».

El ex futbolista chileno del Hamburgo, uno de los refuerzos invernales del conjunto gallego, afirmó que «siempre veía los partidos del Celta y entendía que este equipo se merece jugar una copa internacional. Estando acá esa responsabilidad es aún mayor porque hemos adquirido una forma de jugar muy buena que genera ilusión tanto en el propio plantel como en la gente que nos sigue».

GARA