El Ejército sirio abrió ayer nuevos frentes de guerra contra el Estado Islámico (ISIS) en el este de la provincia central de Homs, tras arrebatar la víspera a los yihadistas el control de la estratégica localidad de Al Qariatain. Con la conquista de esta localidad, 120 kilómetros al suroeste de Palmira, Damasco impide un eventual contraataque del ISIS para intentar recuperar la ciudad.

El objetivo del Ejército sirio es ahora controlar las aldeas de Al Sauana y Janafis, antes de progresar hacia el norte y lanzar un ataque contra la ciudad de Al Sujna, último feudo del ISIS en la región de Homs. Todo ello para preparar sus ofensivas contra el ISIS en sus feudos de Raqa y Deir Ezzor, en el noreste de Siria.

El ISIS ha pasado a la ofensiva en Deir Ezzor y lanzó un ataque contra el aeropuerto y contra localidades del noroeste de la ciudad, en manos del régimen sirio.

Pero el ISIS tiene más enemigos y en las últimas horas ha perdido diez kilómetros de territorio fronterizo con Turquía en el norte de Alepo en una ofensiva de grupos rebeldes sirios, que intentaban ayer arrebatar a los yihadistas el pueblo de Al Rai.

En paralelo, un comandante del ISIS, el tunecino Abu al-Haija, murió hace días en un bombardeo de un drone de EEUU. El ISIS ejecutó a 15 comandantes acusados de desvelar su posición.

Contra Al Qaeda

El portavoz del Frente al Nosra (Al Qaeda en Siria), Abu Firas el Sirio, y 20 yihadistas murieron eldomingo en un bombardeo del Ejército sirio en la región de Idleb. El ataque se interpreta como una advertencia a Al Nosra tras su reciente ataque en Alepo en el que mató a 12 milicianos de Hizbulah.