Álvaro MELLIZO (Agencia EFE)
FERIA INTERNACIONAL DEL PETRÓLEO DE TEHERÁN

LA INDUSTRIA PETROLERA GLOBAL COMPITE POR EL MERCADO IRANÍ

LA INDUSTRIA PETROLERA GLOBAL LLEGÓ A IRÁN DISPUESTA A COMPETIR POR SU MERCADO TRAS EL FIN DE LAS SANCIONES CONTRA ESTE PAÍS, AUNQUE PREVENIDA ANTE LAS DIFICULTADES QUE TODAVÍA SUPONE TRABAJAR EN LA REPÚBLICA ISLÁMICA, TAL Y COMO SE HIZO EVIDENTE EL JUEVES EN LA INAUGURACIÓN DE LA MAYOR FERIA DEL SECTOR DEL PAÍS.

La 21ª Feria Internacional del Petróleo de Teherán abrió sus puertas con un evento en el que estuvieron presentes cerca de 2.000 empresas de ingeniería, técnica, servicios y consultoría vinculadas al sector del gas y del petróleo.

La entrada en vigor el pasado mes de enero del acuerdo sobre el programa nuclear persa que puso fin a las sanciones económicas, especialmente sobre la industria del petróleo, le ha dado este año un aliciente especial a este foro, en el que se multiplicó de forma evidente la presencia de representantes extranjeros respecto a otras ediciones.

Hasta 850 empresas foráneas procedentes de 38 países –entre ellos, incluso Canadá, que no mantiene relaciones diplomáticas con Irán– llegaron a Teherán en busca de negocios, atraídas por las posibilidades que ofrece un sector actualmente en crisis y que ven en la República Islámica «un nuevo maná».

«Este año, tras el acuerdo nuclear, la presencia extranjera es un récord. Naturalmente, estamos muy contentos. Esperamos que la coordinación e interacción que se cree entre las empresas locales y extranjeras imprima velocidad y crecimiento a la inversión», apuntó a Efe Mohamad Naserí, director ejecutivo de la feria y jefe de Relaciones Públicas de la Compañía Nacional de Petróleo de Irán (NIOC, por sus siglas en inglés).

Resultados inmediatos

Según indicó Naserí, la afluencia de tantos visitantes se debe a las «seguridades» que tienen sobre las posibilidades de invertir en Irán, cuyas autoridades esperan ver resultados «este mismo año». Entre los participantes extranjeros el interés por trabajar o, como sucede en muchos casos, retomar los negocios con Irán que quedaron parados con la imposición de las sanciones es evidente, si bien muchos de ellos resaltaron las «serias dificultades y desafíos» que hay que afrontar en el mercado de la República Islámica.

En el caso del Estado español, 14 de cuyas empresas acudieron a la feria, la posibilidad de sacar algo «positivo» es notable, sobre todo debido a las buenas relaciones comerciales que hubo en el pasado.

Antón Pipaón, director comercial general de la alavesa Tubos Reunidos, recordó que durante el período de sanciones, las empresas europeas tuvieron que alejarse del país y su espacio lo ocuparon las de otros países, como China o Corea, «que no sufrieron ninguna consecuencia por ello».

«Regresar no será un paseo en absoluto. Nos hemos quedado fuera de un mercado en el que estuvimos 35 años y ahora viene todo el mundo. En un contexto con la economía global deprimida, todos piensan que Irán será el nuevo maná (...) Será dificilísimo recuperar la posición», previno. Este empresario vasco considera que es necesario «aunar esfuerzos» entre las empresas y las autoridades españolas para «montar estrategias coordinadas», que tendrán que tener un enfoque «más ambicioso y agresivo» para recuperar «las posiciones perdidas y crecer».

Siempre paga

Otros desafíos, como las dificultades que persisten para las operaciones financieras con Irán, técnicamente libres de sanciones pero que aún no se producen con fluidez, parecen cada vez menos preocupantes para los empresarios. «Es complicado, pero es un país que al final siempre paga, aunque cueste», comentó Juan Arana, director gerente de la empresa vizcaína Arflu, fabricante de válvulas de precisión.

Las autoridades iraníes calculan que el relanzamiento de su industria petrolera requerirá unos 20.000 millones de euros anuales durante los próximos diez años. Insisten en que privilegiarán a aquellos países que se mantuvieron próximos al país durante las sanciones y que darán prioridad a empresas que quieran transferir tecnología a la hora de llegar a acuerdos.

No obstante, dicen estar abiertos a negociar con cualquier interesado en ayudar a explotar los yacimientos petroleros de un país que posee el 10% de las reservas probadas de petróleo del planeta y casi un 20 % de las reservas de gas natural.