El grupo Air France-KLM –que incluye Air France, KLM, HOP! y Transavia– ha cifrado en 90 millones de euros el impacto económico de la última huelga de los tripulantes de cabina de su principal aerolínea. El paro convocados por el principal sindicato de ese colectivo en Air France obligó a cancelar un total de 1.400 vuelos entre el 27 de julio y el 2 de agosto, lo que afectó a 180.000 pasajeros. Por otro lado, en julio el número de pasajeros transportados por el grupo aéreo alcanzó los 9,2 millones, un 2,9% más con respecto al mismo mes de 2015, con un aumento del 0,5% de la demanda y un 1% de la oferta. El factor de ocupación fue del 88,8%.