El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, aseguró ayer en Zarautz que su partido dirá «no y no» a «una investidura de Mariano Rajoy y del Partido Popular, tanto hoy como el 26 se setiembre», es decir, después de las elecciones al Parlamento de Gasteiz. La hipótesis está sobre la mesa por varios motivos, como los «votos en B» dados al PP en la constitución de las Cortes españolas (que los jeltzales niegan sean suyos) simultáneamente a la ayuda del PP al PNV para conformar grupo propio en el Senado. También parece probable que a Iñigo Urkullu no le baste ya el apoyo de su socio del PSE para continuar en Ajuria Enea.

Así las cosas, en una entrevista a Europa Press difundida por la mañana, la secretaria general de Podemos Euskadi, Nagua Alba, dijo temer «algún tipo de acuerdo» entre ambas formacioines para asegurarse «unos la Moncloa y los otros, Ajuria Enea». «Este verano han pasado cosas curiosas, como las votaciones tanto del Congreso como del Senado», recordó. «Y después de esos juegos tan llamativos nos encontramos con que se adelantan las elecciones un mes», añadió en referencia a la decisión de Urkullu.

En el acto de Zarautz, Ortuzar quiso ser rotundo al respecto: «Ni hoy ni el 26 de setiembre el PNV va a apoyar a Rajoy y al PP para que gobiernen España de la mano con Ciudadanos. ¿Queda claro?». El PP ya ha verbalizado que le gustaría el apoyo jeltzale, esta misma semana a través de Alfonso Alonso, pero eso le provoca problemas con su socio prioritario de Ciudadanos, que descarta una fórmula en la que entren nacionalistas.

Ortuzar se preguntó, en el mismo tono, si alguien cree que «de la noche a la mañana» al PNV se le han olvidado cuatro años de «rodillo, recortes, recentralización y recursos». «En España, con el PP y Ciudadanos, el PNV no va ni a heredar», apostilló el mandatario del EBB.

Por su parte, el lehendakari de la CAV y candidato a la reelección, Iñigo Urkullu, advirtió de que el acuerdo que intentan cerrar el PP y Ciudadanos para la investidura de Mariano Rajoy, que puede materializarse hoy o mañana, supone «una vuelta al pasado y al puro centralismo». Y, al igual que Andoni Ortuzar, añadió: «¿Cómo alguien puede pretender que el PNV, por acción u omisión, apoye esto? Es imposible».

«Hacemos un llamamiento a la defensa de los intereses de Euskadi frente a quienes quieren liquidar nuestro autogobierno», dijo Urkullu mirando a las elecciones del 25S, en las que invitó a impulsar una «agenda vasca» que resume en «más autogobierno, más bienestar, más convivencia y un nuevo futuro».