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estrasburgo

Juncker apuesta por la seguridad y la unidad tras el Brexit

El refuerzo de la seguridad, junto al incremento de la inversión destinada a impulsar el crecimiento, son las apuestas de la Comisión Europea para recuperar la confianza en el bloque comunitario tras el Brexit. Bruselas, que llama a la unidad, propone un sistema de control europeo para identificar a las personas que entren en territorio europeo.

La Unión Europea (UE) va a sobrevivir al Brexit, pero necesita superar las divisiones, aseguró ayer el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, durante su discurso en la Eurocámara, donde aseguró que los próximos doce meses serán «decisivos» para el futuro del proyecto europeo. Además, apostó por reforzar la seguridad y la defensa a nivel supraestatal y plante&bs;ó propuestas centradas en la inversión y el crecimiento con el fin de devolver a los ciudadanos la confianza en la UE.

En su discurso del estado de la Unión, Juncker enumeró una serie de medidas para volver a unir a Europa, a dos días de la cumbre de Bratislava que reunirá a los líderes comunitarios –sin Theresa May– para reflexionar sobre el futuro de la UE tras el Brexit y que se centrará en la seguridad.

Anunció que propondrá un sistema de control europeo para identificar a quienes tengan previsto viajar a la UE, una medida que enmarcó en la «lucha antiterrorista». «Cada vez que alguien entre o salga de la UE, habrá un registro de cuándo, dónde y por qué», dijo, e indicó que Bruselas planteará en noviembre un sistema automático de información sobre viajes.

Ese instrumento, según señaló Juncker, ayudará a determinar «quién tendrá permitido viajar a Europa» y a disponer de datos de las personas que tienen previsto desplazarse a la UE antes de que lleguen.

«Contra el populismo»

Juncker aseguró que el Brexit «no amenaza» la existencia de la UE, pero urgió a trabajar unidos para luchar «contra el populismo». Insistió en que Bruselas quiere alcanzar «un acuerdo rápidamente para la salida» de Reino Unido, pero advirtió de que Londres no lo tendrá fácil en su voluntad de permanecer en el mercado interior europeo, pero sin cumplir con la obligación de facilitar la libre circulación de personas. «No puede haber libre circulación a la carta», sostuvo Juncker.

La posibilidad de que los ciudadanos de la UE puedan trabajar e instalarse en otro país del bloque libremente impulsó, durante el referéndum británico, a los partidarios del Brexit, una cuestión que también divide en otros países europeos. Esas divisiones, según Juncker, «preparan el terreno del populismo».

La fórmula de Juncker para luchar contra el populismo y responder a las preocupaciones de los ciudadanos europeos en materia de seguridad pasa por avanzar hacia una mayor cooperación militar en el seno de la UE, que podría comenzar con la creación de un «cuartel general único» y un «fondo europeo de defensa», y ampliar su plan de inversiones –hasta los 500.000 millones de euros de aquí a 2020–, para estimular el crecimiento y generar empleos.

«Error fatal»

El martes, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, alertó a los líderes del bloque que no pueden ignorar las lecciones del Brexit y que deben responder en Bratislava a las preocupaciones abiertas con la crisis migratoria. «Sería un error fatal asumir que el resultado negativo en el referéndum británico representa un asunto específico de los británicos», escribió Tusk en su invitación a los líderes de la UE, y agregó que la cumbre constituirá «un punto de inflexión para proteger las fronteras exteriores de la Unión», frente a las preocupaciones suscitadas en los ciudadanos europeos por la crisis migratoria.

HRW critica en papel de Rusia en la crisis de los refugiados

La contribución de Rusia en la crisis de los refugiados sirios es «insignificante» pese a ser uno de los países que más participa militarmente en la guerra en Siria, criticó HRW. Denunció que Moscú no está colaborando a nivel humanitario con la grave crisis migratoria a la que se están enfrentando Oriente Próximo y Europa y le exigió que de cara a la cumbre de la ONU para los Refugiados y la Inmigración, que tendrá lugar el 19 de setiembre, se comprometa a compartir «la gran responsabilidad» que tiene la comunidad internacional con los refugiados sirios. Sostuvo que desde 2011, cuando empezó la guerra, Rusia apenas ha acogido refugiados, alegando que su reasentamiento en su territorio no «está a la orden del día». Moscú ha rechazado a todos los que han logrado llegar a sus fronteras, y les ha denegado el asilo.GARA