Rezan los técnicos más prestigiosos que el verdadero valor de un equipo es la capacidad de ganar los partidos en los que no puede ejercer su juego. Gernika Bizkaia no jugó, ni de lejos, al nivel exhibido hace una semana ante Perfumerías Avenida, pero ganó por 54-49 a un correoso Campus Promete.

Destacadas jugadoras hace una semana como Jefferson y María Pina vivieron un partido aciago, ambas con valoración negativa, y aguantaron en la pista aportando en defensa y rebote, a falta de puntos. Tuvieron que ser Amisha Carter y María Asurmendi las que lideraron la anotación de la escuadra vizcaina. Más que nunca, cada punto contó, porque el triunfo gernikarra jamás estuvo asegurado hasta el pitido final.

El único momento en el que parecía que Gernika Bizkaia se escapaba fue el segundo período. Después de terminar con un pírrico 11-10 en el primer cuarto, las vizcainas apretaron. Los balones perdidos por la escuadra riojana para irse al descanso con un leve colchón: 28-21.

Nicole Romeo mete miedo

Pero Campus Promete no se dejó ir y Nicole Romeo se puso a la tarea de refrendar las ganas de remontar del cuadro visitante. Los 22 puntos de la jugadora riojana metieron el miedo a los espectadores de Maloste, toda vez que el margen del conjunto vizcaino decrecía.

No se encontraban a gusto las jugadoras de Gernika y a falta de menos de tres minutos, un triple de Estebas ponía a las riojanas en cabeza: 44-45. Asurmendi y Carter asumieron la responsabilidad en ese momento, y sumaron un parcial de 4-0 que, aunque no dejara de ser poca cosa, acabó por ser un colchón imprescindible.

Campus Promete se arrimó a un punto, pero Gernika, pese a tener un partido muy pestoso, aguantó la presión desde la línea de tiros libres, con María Pina finiquitando el triunfo local a falta de 12 segundos.