Unas horas antes de su visita a una de las zonas donde están concentradas las FARC, el ministro de Asuntos Exteriores de Alemania –y probable próximo presidente alemán–, Frank Walter Steinmeier, afirmó que, a pesar del acuerdo alcanzado por el Gobierno colombiano y el grupo insurgente, la implementación de la paz «es un proceso difícil».

En una rueda de prensa conjunta con la ministra de Exteriores colombiana, María Ángela Holguín, Steinmeier alertó que habrá quienes quieran «destruir el proceso de paz» y recordó que este implica muchas obligaciones.

Después de reunirse con el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, en Bogotá, el ministro alemán tenía previsto desplazarse hasta la zona veredal transitoria de normalización de Mesetas, en el departamento del Meta (centro), uno de los 26 lugares en los que estarán concentrados los miembros de las FARC durante el periodo de reunión de 180 días. Steinmeier afirmó también que el proceso de paz de Colombia encontró un equilibrio adecuado en materia de justicia y destacó la dificultad de compensar «culpa y castigo, venganza y reconciliación» en el tratamiento penal que debe hacer posible también una solución política.

Por otra parte, El Ejército de Liberación Nacional (ELN) confirmó que ayer comenzaría en Quito la esperada reunión con el Gobierno colombiano para pactar un nuevo calendario que permita el inicio del diálogo de paz anunciado el pasado 31 de marzo, que se ha pospuesto sucesivamente. «Esperamos dar buenas noticias sobre la mesa» de conversa- ciones, afirmó.