Al término de la reunión de la Mesa del Parlamento, la portavoz de EH Bildu, Bakartxo Ruiz, señaló ayer que las acusaciones realizadas por ELA a UGT y CCOO de haberse financiado a través del diálogo social confirman «lo que se venía denunciando» y es que había «una red clientelar de financiación encubierta en aras a esa paz social».

Tras resaltar que es necesario «acabar con esos chiringuitos», dijo no entender la actitud del Ejecutivo de decidir «unilateralmente» el debate del Plan de Empleo en el Consejo de Diálogo Social (CDS) en un momento en el que, en aplicación del acuerdo programático, se debería estar reflexionando sobre mantener o no este órgano. Ruiz indicó que el CDS se creó para la «financiación directa» de algunos agentes sociales y, en ese contexto, apostó por debatir el Plan de Empleo a través de «un proceso de participación muchísimo más amplio».

El portavoz de Geroa Bai, Koldo Martínez, rechazó que el Gobierno de Uxue Barkos haya actuado unilateralmente y afirmó que su formación tiene una «actitud de manos abiertas» a todos los sectores empresariales y sindicales implicados. Abogó también por utilizar «fórmulas imaginativas» para avanzar en el debate del Plan de Empleo.

Sobre las acusaciones a UGT y CCOO, Martínez señaló que demuestran «cómo ha sido gobernada Navarra por UPN» y apeló a «que se terminen esas políticas que benefician a unos pocos con el dinero de todos».

Por su parte, el portavoz de I-E, José Miguel Nuin, que aseguró no entender que ELA y LAB se «autoexcluyan» del CDS, explicó que su grupo quiere que haya «transparencia total» sobre los convenios nominativos, por lo que ha pedido más información al Gobierno de Barkos.