GARA
BOGOTÁ

La ONU pide a Bogotá medios para prevenir los desastres naturales

Los organismos de rescate intensificaron ayer al amanecer las tareas de socorro de víctimas de la avalancha que dejó cientos de muertos y desaparecidos en Mocoa. El jefe de la ONU en Colombia abogó por «determinar las mejores arquitecturas institucionales» que den herramientas a las comunidades para «prevenir este tipo de eventualidades».

Los organismos de rescate intensificaron al amanecer sus esfuerzos en la capital del sureño departamento del Putumayo, en una carrera contra el tiempo para tratar de encontrar supervivientes. Hay un número indeterminado de desaparecidos por la riada de los ríos Mocoa, y sus afluentes Sangoyaco y Mulatos, después de un fuerte aguacero que cayó en la zona el viernes por la noche.

Bajo un cielo nublado, pero sin lluvias, la gente caminaba ayer entre el barro, las piedras, las ramas y los escombros buscando a sus seres queridos o tratando de rescatar sus pertenencias. La mayoría de los barrios afectados son pobres y con población desplazada por el conflicto armado de medio siglo que azota a Colombia.

Desplazados por la guerra

Marta Ceballos, una vendedora ambulante de 44 años, perdió «todo», pero celebra tener viva a su familia. «Dios bendito, no quisiera ni recordar eso. Ver cómo los unos gritaban, los otros lloraban, corrían, en carro, en moto, y cómo el lodo y piedras como casas los iba envolviendo. Fue demasiado, demasiado duro», contó a AFP sobre el caos desatado con la avalancha. «Estaba llueve y llueve toda la noche. Amaneció y siguió lloviendo», agregó esta mujer, víctima del desplazamiento forzado por la violencia.

Martín Santiago, jefe de ONU para Colombia, confirmó el diagnóstico que realizó anteriormente el presidente Santos. El «cambio climático está generando unas dinámicas y vemos los resultados tremendos desde el punto de vista de la intensidad, la frecuencia y la magnitud de estos efectos naturales, como el que acabamos de ver en Mocoa», afirmó Martín Santiago.

La «naturaleza y la magnitud del evento, la catástrofe, la tragedia, es tremenda», dijo el diplomático, quien aseguró que la zona afectada tendrá «impactos» a corto, medio y largo plazo por su «vulnerabilidad y pobreza». Afirmó que en este momento «la atención prioritaria» debe enfocarse en los heridos, las familias afectadas y las familias de los fallecidos.

Santiago indicó que los gobiernos y los organismos internacionales deben estar «totalmente en alerta» para fortalecer sus capacidades de respuesta y prevención en torno a los desastres naturales. Para ello, abogó por «determinar las mejores arquitecturas institucionales» que den herramientas a las comunidades para «enfrentarse y prevenir estas eventualidades, para que todos estemos realmente a la altura de los desafíos que presentan los desastres naturales agravados por la intensificación del cambio climático», apuntó.

El director de la Corporación para el Desarrollo Sostenible del Sur de la Amazonía (Corpoamazonía), Luis Alexander Mejía, explicó que la debastadora tragedia que vive Mocoa ya había sido advertida, pues esta entidad previamente había hecho unos estudios en los que adelantaba que este tipo de acontecimientos podrían pasar por el uso inadecuado de los suelos que agrava estas catástrofes. A esto se le suma que Putumayo se convirtió en el quinto departamento de Colombia que más pérdida de capa vegetal ha tenido, pues hasta 2015 habían sido deforestadas 9.000 hectáreas.

 

Perú se propone crecer «más ordenadamente»

El Gobierno de Perú lanzará el próximo 10 de abril el programa Trabaja Perú en Emergencia, que permitirá crear más de 20.000 empleos temporales en las zonas afectadas por las lluvias, inundaciones y deslizamientos que se producen en el país, informó el primer ministro, Fernando Zavala, en una rueda de prensa en la que participó con el presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski.

El presidente anunció que convocará a todos los líderes de los partidos del país para trabajar un plan de reconstrucción de las zonas afectadas. Aún no ha hecho la convocatoria porque el fenómeno de «El Niño costero» no ha terminado y todavía se analizan los daños que dejará. Kuczynski señaló que «esta circunstancia trágica» debe servir para «poner las bases de un crecimiento más ordenado en las ciudades» en el país, de modo que los pobladores no vivan cerca de los cauces de los ríos, tengan títulos de propiedad y accedan al servicio de agua potable. «No solo es reconstrucción, es construcción también», indicó. GARA