Emmanuel Macron rechaza que se le considere favorito en las elecciones presidenciales francesas y advierte contra los que se centran en criticarle porque «el peor riesgo» es no darse cuenta de que la ultraderechista Marine Le Pen podría ganar. «Los que dicen que Le Pen no puede ganar en la segunda vuelta son los mismos que decían que Trump no podría ganar nunca», alerta el socioliberal en una entrevista publicada ayer por “Le Monde”.

Macron argumenta que si la presidenta del Frente Nacional (FN) termina en primera posición y con una amplia ventaja en la primera vuelta del próximo día 23, «no se sabe lo que puede ocurrir» en la segunda del 7 de mayo. Por eso, un día antes del primer debate en televisión entre los once aspirantes, sostenía que el candidato de la derecha, François Fillon, y el del Partido Socialista, Benoît Hamon, están muy equivocados al dirigir contra él sus ataques. Para Macron, Le Pen es «nuestro principal adversario» y el principal debate se da entre ella y él mismo.

Escenario político

A su juicio, se está configurando un nuevo panorama político en el que él representa «un campo progresista central» que tiene por un lado «una izquierda conservadora o más extrema», simbolizada respectivamente por Hamon y Jean-Luc Mélenchon, y por otro una «convergencia» entre la derecha y la ultraderecha en la persona de Fillon.

Quien fuera durante dos años ministro de Economía de Hollande afirma que en una eventual segunda vuelta con Le Pen él sería «el único candidato que une», y que en ese caso espera reunir los votos de «mucha gente tanto de derechas como de izquierdas».